Capítulo 54

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Sky

Nos dividimos en tres grupos, Chrissy, Jason, Patrick y Lily se fueron en el auto de Jason. Steve, Andy, Nancy y yo en el auto de Steve, a este punto ya me parecía más normal encontrarme a Nancy en todos los lugares donde estaba Steve. Y por último Eddie iba con Chloe, Chance y Nicole en su auto, me estaba inquietando un poco, ya que Chloe siempre está insinuándose a cualquier chico, por suerte ellos dos no iban solos. Habíamos decidido ir al nuevo local de hamburguesas de Benny, los chicos tenían hambre y a decir verdad yo también moría por algún bocadillo.

Nos tomó unos 10 minutos llegar al lugar, todos bajamos de los autos, Steve puso su brazo por encima de mis hombros y empezamos a caminar muy pegaditos, Eddie y Chloe iban delante de nosotros platicando y estaban demasiado risueños a mi parecer, el solo hecho de recordar que una vez los encontré besándose en los vestidores de mujeres, me hacía hervir la sangre, en ese tiempo Eddie y yo todavía nos llevábamos mal, pero, aún así no podía evitar sentirme extraña, tenía que controlarme. Por suerte Nicole y Chance habían estado con ellos todo este tiempo así que seguramente no ha pasado nada y solo es mi mente haciéndome imaginar cosas.

Vi a Chloe tomarle del brazo a Eddie y susurrarle algo al oído, ambos comenzaron a reírse, ¿Dé que tanto se ríen?, Como si Chloe fuera una chica tan divertida... Es odiosa, siempre se mete en mi vida, no la soporto y mucho menos verla tan cerca de mi "lobito", pero sobre todo me estaba molestando que él estaba sonriendo a su lado... Sé que debería confiar en Eddie, pero, no puedo evitar sentir molestia, no sabía exactamente lo que me estaba pasando.

— ¿Amor, estás bien? — preguntó Steve mientras veía mi rostro un poco tenso.

— Si, solo tengo un poco de calor — respondí quitándome la chaqueta de Eddie.

— ¿Podrías entregársela?, Me voy a adelantar, necesito ir al baño — dije dándole la chaqueta a Steve.

— Claro, amor, te apartaré un lugar cerca de mi — dijo dándome un beso en la mejilla.

Vi que Chloe estaba a punto de darle un beso en la mejilla a Eddie y me metí entre ambos para separarlos, escuché un grito de enojo venir de parte de ella, pero no me detuve ni siquiera a disculparme, estaba molesta, irritada, no podía soportar verlos más tiempo juntos, aún seguía sin comprender esto que estaba sintiendo, era un sentimiento nuevo.

Entré al local, era más grande que el anterior, incluso tenía un apartado para música en vivo. Directamente me fui al baño, corrí al lavamanos y abrí el grifo para echarme un poco de agua en la cara, necesitaba relajarme lo más que pudiera o esto iba a salir muy mal, di un gran suspiro y me seque la cara con un pedazo de papel, lo tiré a la basura una vez que lo usé, me miré unos segundos en el espejo para arreglarme el cabello, saqué de mi bolso un lipgloss para ponerme un poco sobre mis labios. Me dirigí a la puerta y cuando la abrí, estaba Eddie en el pasillo, recargado sobre la pared, llevaba puesta su chaqueta y con sus brazos cruzados, parecía que estaba esperándome, sus ojos conectaron con los míos y él sonrió.

— ¿De verdad ya no tienes frío? — preguntó.

— No — le respondí fríamente.

Dí unos cuantos pasos para retirarme y volver con los demás, no podemos estar solos o alguien podría vernos, aunque solo me estaba engañando a mi misma, más bien, no tenía ganas de estar con él, cuando estaba a punto de salir del pasillo escuché como sus pisadas se apresuraban para detenerme tomándome del brazo y casi arrastrándome al final del pasillo, ahí me acorraló contra la pared, puso ambas manos sobre los costados de mi cabeza para que no pudiera escapar.

— ¿Qué crees que haces?, Pueden vernos — comenté un poco enojada.

— ¿Estás celosa? — preguntó con una sonrisa en su rostro.

— No sé de que hablas — respondí evitando contacto visual con él.

— Nunca pensé verte así, te ves tan linda — decía mientras llevaba una de sus manos a mi barbilla obligándome a mirarlo directamente a sus ojos. Esos ojos marrones que brillaban a pesar de tener muy poca luz en el pasillo.

No pude resistirlo más, lo tomé de las mejillas y lo besé desesperadamente, mis besos eran posesivos y él me correspondió con la misma intensidad, nos estábamos comiendo la boca, sus manos bajaron hasta mi trasero y lo apretó suavemente, un suave gemido salió de mis labios, mi interior volvió a encenderse.

— Tus labios saben a cereza — dijo apenas se separó del beso.

— Debemos regresar o los demás empezaran a suponer cosas — dije ayudándole a limpiar con mis pulgares todo el lipgloss que tenía sobre sus labios. Sinceramente no quería irme, lo necesitaba nuevamente, pero estábamos en público y no podíamos hacer mucho.

Él asintió, me dejó salir primero, cuando me acerqué a la mesa, Chrissy me estaba guardando un lugar al lado de ella, me fui hasta la orilla, cerca del ventanal, mi hermana quedó a un lado mío y a su otro lado estaba Nancy, frente a nosotras estaba vacío, los chicos habían ido por bebidas y algo de comer, y el resto estaba ya comiendo y tomando bebidas calientes en frente de la barra, hablando con Benny.

— Bueno, Nancy, a ti te traje un Smoothie de vainilla — dijo Steve dirigiéndose a Nancy.

— Parece que no has olvidado mi bebida favorita — respondió Nancy con una amplia sonrisa en sus labios. Steve no sabía que hacer, se había puesto un poco nervioso, era un tonto...

— Eh..., Para ti amor, te traje un chocolate caliente semi amargo — dijo poniéndome la bebida en mi lugar, claramente no es mi bebida favorita.

— A ella no le gusta eso, le gusta la leche con chocolate, algo dulce y frío — comentó Eddie bastante seguro, cambiándome la bebida, había dado justo en el clavo, sentí un pinchazo en el corazón de alegría, él sabía perfectamente lo loca que me volvía la leche con chocolate... No existe otra persona que me conozca tanto como él.

Todos nos quedamos viéndolo, se hizo un silencio incómodo, había hablado de más, Steve parecía un poco molesto y Jason le dio un pequeño codazo a Eddie, algo dentro de mi pensó que lo hizo sin querer.

— Bueno, a las chicas les gustan las cosas dulces, Steve — dijo Jason interviniendo.

— Lo tendré en cuenta — dijo Steve bastante apenado, rascando un poco su cuello.

— Bien, amor, te traje una malteada de fresa tal y como te gusta — dijo Jason dándole la bebida a mi hermana.

— Gracias — respondió dándole un beso al aire.

Los chicos tomaron asiento, Eddie se adelantó para ponerse frente a mi, Jason fue el segundo para quedar frente a Chrissy y Steve no le quedó más remedio que quedarse frente a Nancy. Comenzaron a hablar del próximo partido, pero mi atención solo iba al chico que tenía frente a mi, le sonreía mientras tomaba la leche con chocolate y él hacía lo mismo mientras daba pequeñas mordidas a su hamburguesa.

— Esto está "muy rico" — comenté dándole un gran sorbo a la bebida, Eddie captó el doble sentido en mis palabras y me dio una sonrisa con picardía.

— Tienes razón, esta comida es "demasiado buena" — Eddie me siguió el doble sentido, dándole una pequeña mordida a su hamburguesa sin dejar de mirarme.

— Si, y el lugar es más agradable que el anterior — respondió Nancy.

Todos nos miraron un poco extrañados, pero nos restaron importancia, volvieron a hablar de otras cosas, la mesa no estaba tan separada, así que me quité el zapato y deslicé mi pie por todo el largo de la pierna de Eddie, al sentir mi tacto pude notar como frunció el seño y tensó su mandíbula, puso disimuladamente una de sus manos al costado de su boca para decirme moviendo solamente sus labios, "pequeña, traviesa". Tomó mi pie con una de sus manos y lo llevó justamente a su entrepierna, sentí su bulto y comencé a frotarlo, el rostro de Eddie estaba excitado, reprimía sus jadeos y sus mejillas se tornaron de un lindo color carmesí.

Amor CristalinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora