Me levante temprano, note que Pedri ya no estaba en la cama así que tome mi celular y aprecia un mensaje de él.
Pedri—Me he ido temprano bonita, por cierto creo que tu padre ya regreso, te quiero y te veo al rato.
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@ester_exposito Un feliz cumpleaños a estos dos, miss u hoy y siempre 🔜
@mikezaraura En nuestro 💗
@oliverzaraura Un surf mañana?🥲
@martaluque_h Se extrañan los fines.
Como costumbre me levante directo a la ducha. Me puse una sudadera y unos shorts y me dirigí al comedor en donde estaba mi padre.
Oscar—Buen día.
Ester—Ni tan buenos. Supongo que ya te enteraste ¿cierto?
Oscar—¿Lo de tú madre?
Ester—Si si. Que mentirosa. Ni me quería haya porque iba a traer un nuevo hombre. Hubiera preferido mil veces que me mandaran a un internado o algo por el estilo, pero yo no quería vivir con ustedes.
Oscar—Yo sabía que ese era su plan desde el principio.
Ester—¿Qué?
Oscar—No te voy a mentir más. Tú madre me llamo hace unos años. Me dijo que había conocido a un hombre y que la cosa iba muy en serio, me dijo que habían pensando en comprar otra casa y que tú te mudarás con ellos, pero al instante negué rotundamente esa idea. No iba a permitir que vivieras con un extraño y menos con un hombre. Le dije a tu mamá que entonces te vinieras a vivir conmigo y me dijo que no, que tú no ibas a querer porque tenías tú vida acá. Y yo le dije que te diera un año más, pero que en ese año no podía regresar a Miami hasta que viera lo que sentía por ese hombre. Y bueno en septiembre me hablo, me dijo que lo quería, pero que no iba a forzarte a que te fueras a vivir conmigo, y que tú te irías a vivir con ella. Así que la única opción que tuve, fue amenazarla y decirle que si no te ibas conmigo la iba a demandar. Entonces tuvo que aceptar, cuando hablo contigo tú no querías pero al final tuviste que aceptar porque si le mande un primer aviso. Quiero decirte que si ella no me hubiera dicho eso de la mudanza, tal vez no estarías aquí. Pero mi instinto de padre, no te iba a dejar.
Ester—Ahora lo entiendo todo. Entonces ¿sí mi madre no te hubiera llamado ahorita seguirías sin saber de mi? En serio que poco corazón tienes Oscar.
Oscar—Ningún día deje de pensar en ti Ester. Te lo juro, simplemente estaba pasando por una mala racha y no me sentía del todo bien para estar contigo.
Ester—¿Nueve años estuviste mal? Mira Papá, yo... yo no te necesito, ni necesito a mi mamá, ni a nadie que cuide de mi, porque siempre fui yo, toda la vida solo fui yo y nadie más. Ahora me he venido a vivir contigo a la fuerza, porque no soy mayor de edad. Pero en cuanto cumpla los 18, yo me regreso a Miami y viviré sola, que para eso tengo las redes sociales.
Oscar—No puedes hacer eso.
Ester—Claro que lo puedo hacer, nadie me lo prohíbe. Pero bueno te dejo para que desayunes. Yo me voy a entrenar, porque nada se puede hacer en esta horrible ciudad.
(.......)
Había llegado al club, me dirigí a los vestidores para dejar mis cosas, había pasado por el campo antes y no había visto a Pedri, supuse que no llegaba todavía, pero no, el chico estaba sentado en las bancas de los vestidores.
Ester—Pero que guapo estás tú. (Me acerqué a él y le di un beso en la mejilla).
Pedri—¿Qué tal? ¿Ya mejor?
Ester—Eh... no mucho, discutí con mi papá. Pero bueno, eso ya es normal. ¿Cómo estás tú? ¿Por qué no estabas entrenado?
Pedri—Vine por mi botella de agua, pero quise descansar un poquito.
Ester—Ah... o sea ¿que el polvo de ayer te dejo exhausto?
Pedri—¿Tú le llamas a eso polvo?
Ester—¿Qué otro nombre tiene? Te has quitado el chupete que te hice ¿eh? ¿Te da pena decir que yo te lo hice?
Pedri—Un poquito. (Yo me acerqué a pedri y le di un golpe en el hombro).
Ester—Idiota.
Pedri—Me lo tuve que quitar porque ya sabes cómo son los demás. Me iban a Interrogar hasta dejarme sin palabras.
Ester—Bueno eso es probable. ¿Hacemos algo después del partido? ¿Oh bueno si quieres el lunes? Para que celebres con los chicos.
Pedri—Me parece buena idea. (Tome del cuello a Pedri y me acerqué a besarle por unos minutos, hasta que por nuestra mala suerte escuchamos una voz).
Gavi—Joder. Yo tengo la exclusiva. (Rápidamente me levante de la banca y le fui a tapar la boca a Gavi, mientras que Pedri cerró la puerta).
Ester—Ven para acá Gavira, siéntate. Ninguna palabra de esto a nadie.
Pedri—Eh, cabrón, que yo me enteré que le contaste a alguien y nuestra amistad se acaba, que tú la boca la tienes suelta.
Gavi—Tranquilos chicos. Pero si ustedes hacen una parejita buenísima ¿por qué lo quieren ocultar?
Ester—Pues porque es mejor hacer las cosas privadas.
Gavi—Okey, okey. Pero yo quiero ir a la boda ¿eh? (El chico tomó una sudadera y volvió a salir).
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Ester—¡Que susto con ese!
Pedri—La verdad es que si.
Ester—Oye, pues me voy a ir adelantando, ¿vale? (Me acerqué a Pedri y le di un beso en la mejilla).
