¡Pero es que tú!

¿Qué pasaria si...

Hoy tenía un examen final, así que llegue más temprano de lo normal, el salón estaba vacío, así que como no tenía nada que hacer, me metí a ver mi Instagram. Me puse a stalkear a Pedri, honestamente era lo único bueno que podía hacer en ese momento.

Comencé a escuchar que alguien venía al salón, así que deje de ver las fotos y dirigí mi vista hacia la persona. Que por cierto era Antonio, un chico de la universidad que siempre se la pasaba haciendo bromas de mal gusto.

Antonio—¿Es tu novio? Es joven. (El chico se acercó a mi teléfono pero yo lo baje de inmediato).

Ester—¿Que ocupas? ¿Me vienes a reclamar algo?

Antonio—No, para nada. Solo que te vi aquí y me quise acercar a hablar contigo. (Mi teléfono recibió una notificación, sólo la revisé y volví a poner mi vista hacia el chico). —¿Tú novio es bueno? Apuesto a que si lo es. No sé por qué, pero supuse que te gustarían los hombres mayores. ¿Tienes varios? (Yo solo me quedaba callada). —Era broma.

Ester—¿Tú tienes novia, Antonio?

Antonio—¿A ver adivínalo?

Ester—Por su puesto que no.

Antonio—¿Por?

Ester—¿Que nadie te lo ha dicho? (Yo solté una pequeña risa). Creo que no dire nada. (Le dije sarcásticamente).

Antonio—Supongo que eres del tipo de mujer que ofende con las palabras.

Ester—Y tú, del tipo que incomoda rápido.

Antonio—¿Cómo? Ester, tienes mucha suerte de ser mujer, si fueras hombre, ya te habría golpeado.

Ester—¿En serio? Yo pensé que solo golpeabas mujeres. (Antonio se quedó callado y yo al instante reí). ¡Era una broma! (Le dije en un tono burlesco). Fue gracioso cuando lo dijiste y quise intentarlo. Pero si me disculpas, estoy haciendo algo, ve y siéntate, de preferencia en otro lado, por favor.

El chico solo me miro y se fue. Antonio y yo no nos llevábamos muy mal, de hecho creía que me odiaba, porque un día le dije que no servía para nada, ya que había hecho un trabajo que nos tocaba en equipo mal.

Pedri POV...

Había terminado el entrenamiento. Hoy recogería a Ester de la universidad e iríamos a comer a un lugar que había visto la rubia por internet.

Me estaba cambiando en los vestidores, cuando entra Gavi.

Pedri—Ay, ¿pero que te has hecho, hombre? Te ves bien.

Gavi—Voy a salir con una chica.

Pedri—Enhorabuena, ¿y cómo es?

Gavi—Muy guapa, y divertida, voy a ver qué pasa, tal vez en unas semanas ya la pueda traer aquí.

Pedri—Ah, entonces la cosa va rápido, pues suerte.

(..........)

Había llegado a la universidad de Ester, como comúnmente lo hacía, me estacione en un lugar de inválidos porque estaba llenísimo, le envié un mensaje y en cuestión de minutos llego.

Ester—Hola, guapo. (Me acerqué a Pedri y lo bese).

Pedri—Te ves muy linda vestida de doctora ¿eh?

Ester—Lo qué pasa es que hoy fuimos al laboratorio, y nos pedían la bata.

Pedri—Ahh, mira, luego me platicas todo con detalle, ¿lista para ir a comer?

Ester—No me odies, pero... hoy he tenido un poco de asco con la comida, ni siquiera pude desayunar.

Pedri—¿Te caería mal el sushi de anoche?

Ester—No lo se, tal vez sean las medicinas.

Pedri—Ester.... ¿No estarás embarazada?

Ester—No me puedo embarazar de un día al otro.

Pedri—Amor, tenemos sexo casi diario, claro que puedes.

Ester—Pero si he reglado y todo, no puedo, es más no creo.

Pedri—Cómprate una prueba y vamos directo a tu departamento para que te la hagas.

Ester—No es para tanto, ¿para que me la compro si va a salir negativa? Son los medicamentos, ya no me caen bien.

Pedri—Ester, voy a ir a la farmacia y me voy a bajar yo por la prueba, no seas necia y háztela.

Ester—Bueno, está bien.

Me dirigía a la farmacia más cercana que encontráramos, a mi eso de que a Ester le diera asco la comida si me ponía de los nervios, porque ella siempre se come todo, y bueno me ha sacado un susto con eso de que ahora no quiere comer.

No les iba a mentir, tenía miedo de que saliera positivo, pero bueno, no estaría mal un mini Pedri o una mini Ester.

....................

Pedri—Ten, aquí está la prueba, ahora vamos a que te la hagas.

Llegamos al departamento de Ester, la chica dejó su mochila en la sala y rápido fue al baño a hacérsela.

Pedri—¿Como vas?

Ester—Que apenas me la voy a hacer, tú tranquilo.

Pedri—Como quieres que esté tranquilo, si puede ser que vaya a tener un hijo.

Ester—Pedri... no digas estupideces, que tú así de intenso y yo nerviosa, nos va a poner mal.

Pedri—Bueno, te espero en la sala, pero sal lo más rápido que puedas.

Me quede unos minutos sentado en el sofá, hasta que escucho a la rubia salir.

Pedri—¿Qué pasó? ¿Estás embarazada? (La cara de la rubia me espanto muchísimo, estaba toda seria pero luego se empezó a reír).

Ester—Obvio no, te dije que eran los medicamentos.

Pedri—Ah, entiendo.

Ester—¿Querías tener un hijo Pedri González?

Pedri—Pues la noticia la hubiera aceptado. ¿Que tú no quieres tener un hijo conmigo?

Ester—Apenas voy a cumplir 20 años, ¿cómo voy a querer un hijo? Tal vez en un futuro, cuando haya hecho todo lo que tengo en mente, ahí es cuando voy a tener un bebé, ahora no.

Pedri—Tienes razón, somos muy jóvenes.

Ester—Pero eso si, mis hijos saldrían muy guapos, obvio, gracias a mi.

Pedri—¿Y yo que? Yo también estoy guapo ¿eh?

Ester—Mmm, ¿te has visito en un espejo?

Pedri—Pero mala que eres.

Ester—No te creas, mi amor, eres el hombre más guapo que mis ojos han visto, de verdad. Si me pusieran elegir entre Robert Pattinson y a ti, elijo mil veces a Robert Pattinson. (La cara de Pedri me dio mucha risa, se llevaba pero no se aguantaba cuando le decía algo).

Pedri—¿Con que así vamos a estar? (Me pare del sillón y me acerqué a besar a Ester). —Sígueme diciendo cosas y me la voy a cobrar haciéndote un hijo ¿eh?

Ester—Pues cóbratelo muchas veces, porque no creo que lo tengas... por ahora. (Ester me volvió a besar y ambos caímos en el sillón).

Oigan a veces se pone el nombre de otras personas, por que él teclado me las cambia así que gracias por decirme 💗