Embarazada ~ 69

4.7K 260 31
                                    

Narra Lali:

Esto era muy raro. Atendí la llamada muy extrañada y una voz de mujer se escuchó del otro lado de la línea:

— ¿Hola? ¿Sos Mariana?

— Sí, soy yo.

— Que bueno, quería hablar con vos — aclaró su voz y continuó —, soy la mamá de Peter, Claudia. Ya nos conocíamos de hace unos meses...

Ay no, la mamá no podía ser... Pero desgraciadamente era. Dios... Peter era re infantil, que todavía le tenía que seguir defendiendo su mamá.

— Sí, ya nos conocemos. ¿Ha pasado algo?

— Peter me contó lo que pasó entre ustedes. Y en verdad, no voy a estar del lado de ninguno. Lo único que te voy a decir es que tenés que darle la oportunidad a Peter de ser padre, no podés prohibirle que vea a sus hijos.

— Perdón, pero el fue el primero que se alejó. Me pegó, nos peleamos y al rato besó a otra chica. Yo no tengo problema, pero él solito se olvidó de sus hijos y eso duele.

— Ama a sus hijos. Conozco a Peter, y no tiene mal corazón.

— Como usted diga. Que él solito se busque que le dé bola y le hable de los bebés. Mientras que él no haga su labor, yo no haré la mía.

— Sé bien lo que es que un hijo crezca sin su padre... Así que lo mejor será que se arreglen, al menos por los bebés — y entonces fue cuando cortó la llamada.

No podía creer lo cara dura que era la mamá de Peter. Casi más cara dura que él... No podía defenderse solo y venía ella a reclamarme. Eran mis hijos, estaban en mi panza y yo tenía todo el derecho a hacer lo que quisiera con ellos porque él no se había preocupado por ellos. Iba a tener que remarla mucho para que yo pudiera perdonarle y que volviera a acercarse a los bebés y a mí. Lo iba a tener muy difícil...

-...-

Narra Peter:

Mamá me contó todo lo que había hablado con Lali. Y si, como ella misma me había pedido, yo iba a luchar por poder tener a mis hijos a mi lado, porque yo no sería como mi viejo, yo me ocuparía de ellos de verdad, les vería crecer pasara lo que pasara.

Cuando subí a mi cuarto, encendí la computadora y empecé a buscar a todos los Nicolás Vázquez que podía haber en Internet. Apunté a varios en un papel y después fui descartando. Tenía que haber nacido en los años 60, ni más ni menos, porque no tenía ni más de 30 ni menos de 20 cuando mi mamá lo conoció.

En total quedaban 4 personas, las 4 en Argentina que se llamarán Nicolás Vázquez. Busqué su numero en la guía telefónica y decidí llamarlos mañana por la mañana en cuanto me despertara.

Cuando me metí en la cama... Comencé a pensar en Lali. En realidad, era la única persona por la que verdaderamente había sentido amor. Y ella llevaba a mis hijos en su panza... Y tenía que acercarme a ella por mis hijos, luchar y cambiar todo lo que yo no había tenido: un padre de verdad.

Esa noche me dormí bastante rápido. Toda la noche de seguido. Me desperté a las 8 de la mañana. Y fue cuando decidí empezar a llamar a los números de teléfono que había buscado la noche anterior. Supuse que ya estarían despiertos.

El primero no recordaba a ninguna Claudia Vargas, así que lo descarté. El Segundo tampoco... Hasta que llegué al tercer Nicolás Vázquez:

— ¿Hola?

— Hola. Siento la molesta — tragué saliva —, ¿alguna vez conoció a alguna Claudia Vargas?

Un silencio apareció en el otro lado de la línea.

— Señor, ¿sigue ahí?

— Sí. Conocí a una hace ya mucho tiempo.

— Mire... No sé si quiere hablar de esto. Pero ella tuvo un hijo con un a Nicolás Vázquez.

Mi supuesto padre comenzó a toser en el otro lado de la línea:

— Mire, si usted es Juan Lanzani no quiero saber nada, me olvidé de ese bebé hace tiempo, y de Claudia también.

— Yo soy ese bebé.

— ¿Sos el hijo de Claudia Vargas? — me preguntó asombrado.

— Sí, soy yo. El hijo de Claudia Vargas y Nicolás Vázquez. Y sí, también estoy buscando a mi viejo.

— Dios mío no lo puedo creer...

— Si a usted no le molesta me gustaría conocerlo... Por favor.

— Por mí no hay ningún problema... Pero quiero pedirte un par de cosas.

— ¿Cuáles?

— La primera, que tu papá no se entere, y la segunda, que tu mamá venga al encuentro, tengo ganas de verla, de verdad.

— Perfecto — sonreí.

— Genial. Les espero en mi casa esta tarde.

— Iremos, ahora hablaré con mi mamá.

— Bueno. Y gracias por buscarme, tenía ganas de conocer a mi hijo mayor.

¿Hijo mayor? Así que tenía más hermanos... Uau... ¿Les conocería también esta tarde?

-...-

(Chicas, vuelvo a hablarles de mi nuevo grupo: Peña Lalita. Estamos en Instragram, Twitter y WhatsApp. Pueden unirse a nuestro grupo de WhatsApp mandando su número por mensaje privado. Es un grupo muy nuevo y necesitamos máxima difusión. Buscamos todavía puestos en Argentina y la ayuda para que crezca en ambos países: España y Argentina. También se pueden unir personas de otros países. Muchas gracias y perdón por la tardanza en subir el capítulo.)

(Un beso: @lalimyqueen )

EmbarazadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora