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La vez que Harry quiso volver a querer matar a algunas personas, fue cuando le hicieron la broma a Mariska. La cual fue que le tiraron un balde de pegamento y plumas de gallina,le pintaron el cabello con un hechizo, de un color del arcoiris demasiado chocho. Incluso le hicieron salir granos en la cara, cortesía de Tom. No encontraron al culpable y eso hizo sonreír victoriosos al trío, Zack y Marshall les aplaudieron por la broma y Harry los regaño por una hora.

Ahora, al pasar los días el grupo de seis se volvieron más unidos, Tom ya podía decir con seguridad que tenía amigos, aunque a veces fueran unos estúpidos Gryffindor, también tenían sus momentos de Slytherin. La cosa, es que en ese momento se encontraban saliendo del Instituto para ir a la casa de Riddle y Potter.

-hoy estuvo súper aburrido-susurraron Kolly y Seiya.

-odio el Instituto-siseo Tom.

-ni que lo digas-apoyaron el resto.

Caminaban por una calle un poco desolada, hasta que escucharon un conjunto de gruñidos feroces, eso hizo a los seis chicos tensarse. Giraron la cabeza y vieron con claridad a seis enormes perros. Pero lo que hizo a asustar a cinco de los seis fue que eran....

-¡¡Pitbull!!-gritaron. Tom los miró raro.

-¿qué?-pregunto.

-esa raza de perro es peligrosa, ya que pueden matar a un adulto con facilidad-explicó Harry a lo que Tom abrió los ojos.

-y, si corremos-propuso Zack.

--acordaron todos.

-¡a correr!-gritó Marshall.

Los seis corrieron al mismo momento que los perros los perseguían ladrando. Se metían entre los carros y en la carretera, ahora corrían entre los carros en movimiento, sobre ellos y en el suelo. Tom corría maldiciendo al no poder hacer hechizos por los muggles y Harry entraba en pánico. En tiempo récord llegaron a la casa, pero ni las escaleras los detuvieron las subieron con una habilidad envidiable. Pero el obstáculo era la puerta de la casa.

-¡¿quién rayos trae las llaves?!-

-¡somos demasiado hermosos para morir!-

-¡Tom, yo te dí las llaves!-

-¡no las encuentro!-

-¡apúrale mijo, que nos hacen carne molida!-

-¡ya se acercan!-

-¡diganle a mi madre que no me agradó ser su hijo!-

-¡Kami-sama, salvanos!-

Tom estaba desesperado, hasta que los perros ya estaban en la subida de la escalera, solo se le ocurrió decir algo.

-¡reducto!-exclamó y uno de los perros salió volando.

-¡Avada Kedavra!-grito Harry y otro perro cayó al suelo.

-¡sectusempra!-

-¡bombarda!-

-¡expelliarmus!-

-¡Fire Charm!-

Los dos chicos suspiraron aliviados al verse liberados de los canes.

-si podían hacer eso, ¡¿por qué no lo hicieron desde el principio?!-exclamó histérico Kolly.

-toma, deja de gritar y abre la puerta-sugirió Tom entregando las llaves.

-a la hora que se les ocurre aparecer-maldijo Harry a las llaves.

Dimensión Extraña ¡¡¿Y Tú?!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora