Dimensión Extraña ¡¡¿Y Tú?!!

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Hola!

Antes que nada, perdón por el retraso. Estaba un poquito bloqueada :') y perdón por ser un sólo cap, Ah! Y aquí está la duda de las armas, de donde las consiguieron :þ

Y me puse a pensar, que pienso dedicarle un cap a quien comente primero, esta vez sí será para una sola persona.

Aunque la condición es que solo un capítulo por persona, para que así todas puedan tener un capítulo dedicado. La verdad, no sé si hay chicos leyendo esto (si los hay, avisen) es por curiosidad.

Bueno, lean!

Xxxxx

Tom en un rápido movimiento se levantó y comenzó a disparar a los enemigos, los demás siguieron su ejemplo. Cuando Tom le dio a uno de los hombres en la cabeza fue que habló.

-Zack, la silla, a la ventana-ordenó manteniendo a los atacantes a raya con ayuda de los demás.

Zack al entenderlo se levantó tomando una de las silla de la cafetería y lanzandola al vidrio que separaba el lugar de la calle. Las demás personas soltaron un grito al escuchar al vidrio romperse y Tom lanzó un hechizo aturdidor que dejó a los atacantes fuera del juego por un momento.

-¡Vámonos!-exclamó Tom mientras los chicos salían teniendo cuidado de no incrustarse los pedazos de vidrio en el cuerpo.

-Hay que buscar un callejón-Harry corría por las calles junto a los demás.

-¡¿Para qué?!-preguntaron exaltados los gemelos, no captando la idea del traslador.

-Si no se han dado cuenta, gemelos idiotas, tenemos los trasladores-gruñó Tom corriendo detrás de ellos cuidandolos de los disparos que lanzaban sus perseguidores.

-Ou-susurraron los gemelos apenados de habérseles olvidado ese detalle.

-Ese parece un buen lugar-señaló Marshall un callejón poco transitado.

Tom lo vio, pero al sentir una bala rozar su cabeza no lo pensó mucho.-¡Adentro!-ordenó.

Harry fue el primero en entrar, seguido de los gemelos y los chicos, Tom entró de último.

-Ah, necesito aire-jadearon los chicos mientras se sostenían de la pared.

Harry se sostuvo de sus rodillas y Tom estuvo alerta sin la mínima señal de estar cansado. De pronto algo brilló entre la oscuridad y pasó a una velocidad asombrosa.

-Ugh-se quejó Harry cerrando un ojo y tocando su mejilla derecha al sentir un ardor. Al tocarlo se dio cuenta que era sangre.

De nueva cuenta se hizo visible el brillo blanquecino, pero esta vez, antes que fuera un golpe mortal para el Potter, una mano se interpuso mientras el filo de la cuchilla se hundía en su palma manchando la hoja con su sangre.

-¡Tom!-exclamó Harry al ver al oji-rojo frente a él y sosteniendo la cuchilla. No sabía en que momento había llegado a su lado, pero ahora se encontraba con una mirada fría.

-Rápido-halago el atacante riendo momentos después con crueldad-Pero están rodeados, rindanse-aconsejó el tipo saliendo de las sombras tratando de sacar su cuchilla de las manos del Riddle.

Se sorprendió al saber que poseía una gran fuerza. Los gemelos y los chicos miraron preocupados a Tom y a Harry, no querían que sus amigos salieran lastimados.

-Jamás-siseo Tom apretando la hoja de la cuchilla, agrietandola-Mientras respire, no les dañaras-aseguró mirándolo fijamente-Y te puedo asegurar algo, wendigo, tu serás el que te rendiras al final-prometió mientras sus ojos brillaban peligrosamente-Activen los trasladores-ordenó.