Un Príncipe Americano [ Saga MEDICOS Parte 2]

Capitulo 10

Vanessa

Vanessa sueña con una soleada playa, ¡oh si! bronceando su blanca piel y recibiendo los rayos de solar en su cuerpo desnudo, hasta puede sentir la arena entre sus dedos, todo iba tan bien...

— ¿Tía porque estás desnuda? —

Se despertó cuando su sobrina saltó sobre su estómago. Su rostro se afligió de dolor y el lloriqueo del bebe hizo que por fin abriera los ojos molesta, en pequeño se refugia en su pecho buscando el pecho de su madre y se asustó por el contacto tan íntimo. En medio de su aturdimiento, levanto las sabanas y reviso su cuerpo. Rodo los ojos.

— No estoy desnuda Abby, mira mi pijama — La niña negó con la cabeza. Mostro sus dientes de leche y por fin le enseño lo que llevaba escondido en la espalda. 

— Aquí no tía, pero en la revista si lo estas. Mi mamá y tu tienen los mismos senos, mira —

Vanessa se sienta asustada en su cama, tomo a Caleb en brazos y miro la revista. Definitivamente solo un poco de sus senos estaba cubierto por su cabello, aun recuerda aquella salida con su novio, un poco extraña viajando por cada estado de Estados Unidos, ¿cómo la consiguieron? la revista tenía tantas fotos que tuvo que cubrir la revista para que su sobrina no siguiera viendo nada. 

"La Barbie latina regresa a conquistar Londres"

¿Que? Yo no he regresado a conquistar nada.

— ¿Donde encontraste esto? — se puso en pie para preparar el biberón del bebé.

— Tía, la revista entró por su buzón y como no tenía nada que hacer, la revisé — ¿qué estaba haciendo en mi buzón? Su sobrina sonrió desde la cama, brincando y mirándose en el espejo
— ¿Ya nos vamos al palacio? —

Se detuvo con el bebé en brazos, tiene puesta la pijama, su cabello está desecho, no puede encontrar sus zapatos por ningún lugar y quiere que la lleve al palacio ¿niña estas loca?

— No voy a llevarte Abby, tu mamá llegará en una hora y le encantará acompañarte a conocer al príncipe, es su fan —

Abby se detuvo junto a las escaleras, su vestido colgando de un hombro y su rostro lleno de emoción se apagó por un momento, está a punto de llorar y su tía lo sabe.

— Mi mamá no va a venir, me lo ha dicho por la mañana — su rostro tiene lágrimas y Vanessa se acerca para acomodarle su corona, logrando que se sujete en su cabello castaño, limpia las lagrimas de sus mejillas rosadas.

— La llamaré, estoy segura que estará aquí en una hora — la niña sonrió y sé fue a ver de nuevo una película de Disney.

El trato era cuidarlos un fin de semana.

Sus ojos se cierran del sueño y se agacha por el suelo buscando entre los juguetes su celular. Maldita sea Alexander cuando decidio jugar, su casa está hecha un desastre. Definitivamente le será muy difícil ser mamá. Cuando por fin su prima contestó el teléfono, sonrió alegre.

— ¿Vas a venir por ellos verdad? — pregunto nerviosa escuchando las risas de su prima por el auricular.

— Sobre eso... —calló por un momento — Te juro que iré mañana, nos ofrecieron la mejor oferta en el hotel —

—¡¿Que?! — casi grito con cuidado de no despertar al bebé, sus manos están llenas de libros y apenas puede ver donde camina — No lo entiendes, no puedo cuidarlos hoy, tienes que venir —