Los Viajes de Nautilus

Parte 3: Ausente

Nautilus y Nami decidieron acompañar a Nunu (y Willump) en su misión para salvar la Navidad, viajando a la no tan lejana región de Freljord.

Pero primero Nami se ofreció para ir a avisar a los Emisarios. Decidió decírselo a Singed, ya que seguramente estaría en el laboratorio del Instituto de Guerra.

"¡Singeeeeed!"

"¿Mmm? Oh, hola Nami..."

"¿Te pillo ocupado?" - preguntó al verle frente a varias pociones

"Un poco... pero dime, ¿qué quieres?"

"Vengo de parte de Nautilus"

"¿Sí? ¿Hay algún problema?"

El químico escuchaba lo que la sirena le decía, pero al mismo tiempo estaba algo distraído por controlar uno de sus experimentos.

"Hemos decidido ayudar a un niño a ir a Freljord para evitar que se desate una maldición..."

"Ajá... maldición..."

"Sí, una maldición que afectará a la Navidad..."

"Ya veo... Navidad... dime, ¿esto te parece color purpura o fucsia?"

"Parece fucsia"

"Lo suponía..." - dijo algo preocupado - "¿Y cuándo os vais?"

"Nos vamos mañana y probablemente volvamos como muy tarde tras 73 días"

"Ya, claro, que graci... ¿dónde he metido..."

"Vengo para que se lo digas a los Emisarios del Mal"

"Sí, claro, yo diré que estáis de viaje y... ¿tenéis mapa?"

"No, no tenemos ninguno..."

A pesar de tener la vista centrada en sus pócimas entendió más o menos lo que le decía. Algo de un viaje, una broma de 73 días y Freljord...

Pero sí sabía que Nautilus no sabría llegar del todo solo.

"Hay un mapa de Runaterra por esa mesa de allá"

"Qué... oportuno..."

"Cuántas menos preguntas hagas mejor"

"........"

"........"

"¡Oh! ¡Muchas gracias Singed!"

"De nada... oye, si vais a Freljord traedme un poco de Hielo Oscuro"

"Hielo Oscuro... lo anotaré"

"Oh, y aseguraos de ir por la ruta de la Izquierda, os llevará directamente, si acaso tendréis que pasar por fronteras Demacianas..."

"Ruta de la izquierda"

La sirena cogió el mapa y se fue a reunirse con Nautilus, que estaba conociendo un poco mejor a los dos que le acompañarían.

"¡Entonces tu madre está muerta!"

"......."

"¡La mía también!"

"Snif.. snig..."

"¡Pero de todos modos no la recuerdo! ¡Ojalá tu no la recordaras!"

"Sniff..."

"Warraaaahhh"

"¡Nautilus! ¡Nunu! ¡Willump!"

"Na... Nami..."

"¡Oh! ¡Ya está aquí Nami!"

"Nauti, ya he avisado a Singed y me ha dado un mapa de Runaterra"

Nunu se dio un par de palmadas en la cara. Debía comportarse como un niño mayor.

"Eso es increíble" - dijo intentando parecer animado - "Podremos... llegar antes"

"Bien, me ha dicho que hay dos rutas"

"¿Dos rutas? ¿Qué rutas son?"

"Una es corta, tardaríamos un par de semanas y solo tendríamos que pasar por la frontera de Demacia..."

"¡¿Segunda opción?!"

"Dar un enorme rodeo y pasar por territorio Noxiano, montañas del sur, Monte Targon, Shurima, Ixtal, Zaun, las Islas de las Sombras, Jonia..."

"Suena a que nos llevará mucho más tiem..."

"¡Iremos por esa segunda ruta!" - decidió el tanque

"¡¿Cómo?! ¡Pero si nos llevará semanas y semanas!"

"¡Warraaaahhh!"

"¡No quiero pisar Demacia! ¡Además, mis pasos son enormes y no me canso, por lo que llegaremos con tiempo!"

"No sé yo qué decir... Nami, dile algo..."

"¡Es una gran idea Nauti! ¡Así podremos visitar todos los lugares de Runaterra!"

"Pero... pero..."

"Wwwraaa...."

"¡Excursión! ¡Excursión!"

"........"

"¡No se hable más! ¡Pequeño Nunu! ¡Mañana partiremos hacia el sur!"

Mientras tanto, en el laboratorio de Singed, el químico ya ha terminado de ordenar todas sus pociones y el nuevo experimento.

"Por fin avancé algo..."

"Eh, Singed" - le avisó Veigar - "¿Has visto a Nautilus?"

"Estará un par de días fuera"

"Oh, bueno, si solo son un par de días..."