Los Viajes de Nautilus

Parte 112: Ixtal

Nuestro peculiar grupo de personajes se encontraban en las selvas de Ixtal, disfrutando de un clima medianamente agradable.

Lo único que no era tan agradable era el hecho de que Rengar, el cazador, había manifestado la intención de... bueno, cazarles...

Y no, independientemente de lo que piense Nami, esto no es bueno.

"Sois muy aburridos"

"Nami, deberías tomarte esto más en serio" - le regañó Loto

"Un cazador quiere matarnos" - le resaltó Yuumi - "¡Matarnos!"

"Nautii y yo tenemos un largo historial de personas que han intentado matarnos"

"¡Eso es cierto! ¡Como aquella vez que el Instituto se llenó de bichos del Vacío!"

"O aquella en la que nos atacó un paz raro gigante"

"¡Esos fueron buenos tiempos!"

"Nami..."

"¿Qué ocurre? Nunu"

"Quizás deberías hacer un poco más de caso a lo que dicen"

"Pero..."

"Acabas de recuperarte de una enfermedad, y no estás en el mejor estado para encarar a Rengar, ¿no crees?"

"Wrruuuaahh"

"Agradezco vuestra preocupación, pero tampoco es que estemos en desventaja"

"¡Somos cinco y él solo es uno!"

"Wrruaaahh"

"¡Perdón! ¡Somos cinco y un yeti! ¡Y él solo es uno!"

"Tibbers también debería contar"

"¡Perdón! ¡Somos seis y un yeti! ¡Y él solo es uno!"

"Wrrrruaaah"

"Willump, ya deja de quejarte con tu afán de protagonismo"

"Wrrruaaah"

"No me levantes el tono, jovencito" - le regañó la sirena - "Pero Nautii tiene razón, somos seis y medio y él solo uno"

"Y aún así caíste en una de sus trampas"

Loto y Yuumi parecían ser los más conscientes del peligro que podían llegar a correr.

Nunu también, pero más dispuesto a aceptar que quizás en número estaban más seguros. Algo distraído fue que notó algo en los matorrales.

Se acercó para ver ocultándose detrás de un árbol a...

"Nunu, ¿pasa algo?"

"Acabo... acabo de ver a un yeti igualito a Willump"

"¿Wrrruuaah?"

"Pues Willump no se ha movido de aquí"

"Ya lo sé, Annie, digo que era igual a él, pero..."

"Rengar dijo que en estas selvas los yetis eran extremadamente raros"

"¡Quizás hayas visto a Rengar y creyeses que es Willump!"

"Tienen el pelaje distinto, y vi claramente que tenía cuatro brazos"

"Mmm... qué extraño..."

"Yuumi, ¿qué información tiene el libro sobre esta selva?" - preguntó Loto

El libro revoloteó alrededor de la gata, abriéndose justo delante de ella para que pudiese leer cómodamente sus páginas.

"Tiene una numerosa familia real al mando... hay mucha variedad de vastayas..."

"........"

"Y hay algunas ruinas interesantes... poco más"

"Quizás fuese eso, algún vastaya con tumores o aspecto raro"

"Nami, estoy seguro de lo que vi"

"Vaaaale" - se quedó pensando por unos segundos - "Entonces haremos una cosa, mientras atravesamos esta jungla..."

"Mortalmente peligrosa"

"Mientras atravesamos esta mortalmente peligrosa jungla, intentaremos dar con el paradero de ese misterioso yeti"

"¡Wrruaaaah!"

"¿Seguís pensando en atravesarla?"

"¡Nos gusta el riesgo!"

"El riesgo es lo que casi acaba con la vida de Nami"

"Y gracias a eso conocimos a la sugar mommy del Vacío"

El Marai morado parecía cada vez más consciente de que estos tipos podían morirse en cualquier momento por su propia estupidez.

Los únicos con algo de cerebro eran la gata y el Freljorniano.

"Quizás... quizás Rengar pueda ser evadido..."

"Yuumi, hablamos de un individuo que caza aquí a diario"

"Lo sé, pero Nautilus ha demostrado ser bastante adepto en combate"

"........"

"Hasta donde sé ha enfrentado a una legión noxiana, hizo frente a los solari, también peleó contra el Destructor y..."

"¿Y lo hizo solo o con ayuda?"

"Pues..."

"Lo siento, pero... mi confianza aún no está totalmente con él..."