Parte 72: Ni las tormentas

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El llamado Destructor avanzaba implacable, movilizándose bajo las arenas de Shurima como si de un voidborn local se tratase.

Al menos lo hizo hasta que localizó una fuente de magia cercana. 

El ascendido conocido como Nasus era la fuente de dicha magia, siendo que se encontraba acompañado por la llamada Ehlane.

"Lord Nasus, ¿ocurre algo?"

"Hasta hace unos segundos escuchaba un ruido proveniente del horizonte cercano"

"Oh... vale..."

"Ya no lo escucho"

"Eso significa..."

"Que ya no esté en movimiento"

"Lord Nasus, permítame..."

La mujer empuñó su lanza y la clavó en la arena, cerrando los ojos para notar el movimiento de la arena, excluyendo el viento...

Había algo raro... una duna que no debía de...

"¡Lord Nasus!"

"¿Qué ocurre?"

"¡Esa duna de ahí enfrente es..."

Un temblor de tierra comenzó a azotar la zona, siendo que desde la arena surgió un colosal ser similar a Nautilus rodeado de una energía verde.

"El titán..."

"¡Grruuaaaahhhh!"

"Ehlane, reposicionate" 

"¿Qué es lo que tiene en..."

Nasus alzó su mano para emitir un Marchitar en su enemigo, que se vio rodeado de una misteriosa energía morada.

Ehlane por su parte se distanció de Nasus y usó sus poderes de control de la arena para intentar agarrotar al titán.

"Lord Nasus, no parece que esté funcionando"

"La arena no parece sujetarlo bien..."

"No me refería a la arena"

"¡Gruaaaaahhh!"

"Sino a su magia..."

El Destructor emitió un fuerte destello de luz verde, deshaciéndose de la magia de Nasus.

En respuesta el ascendido también liberó parte de su magia, empezando a crecer de tamaño ante el asombro de Ehlane.

Si bien esa habilidad le era conocida, rara vez la había visto, pues consumía mucha magia y apenas duraba unos minutos.

"¡Detente ante tu ataque! ¡Criatura!"

"¡........!"

"¡Te lo ordena un ascendido!"

"¡Grrrrr!"

"¿Qué estás..."

"¡Graaaaahhh!"

El titán empezó a golpear a Nasus, siendo que el brujo podía notar su magia ser drenada.

¿Acaso esto era efecto de su poder rúnico? Le atacó con un Golpe Absorbente, pero parecía que esa magia no podía ser drenada.

Los golpes continuaron entre ambos, con el Destructor tomando ventaja.

"¡Lord Nasus! ¡Debe retirarse!"

"¿Replegarnos? Imposible..."

"¡........!"

"Me haría falta un punto cieg..."

"¡Graaaahh!"

En cuanto el Destructor atacó de nuevo, Nasus alzó la arena de su alrededor como resultado de su Furia de las Arenas.

Pero como se hizo evidente a los pocos segundos el titán no podía ser cegado.

Unos rayos de color verde impactaron al ascendido, procedentes de los ojos del monstruo, y provocando que cayese en la arena.

La criatura perdió el interés en él conforme fue recuperando su tamaño habitual.

"Lord Nasus... ¿se encuentra bien?"

"Arrg... siento la magia fluir de nuevo en mi..."

"La... ¿magia?"

"Parecía como si pudiese absorberla o neutralizarla..."

"¿Cómo es eso posible?"

"¡........!"

El titán buscó nuevamente la ruta que estaba siguiendo, aquella que la estaba guiando hacia el objetivo para el que le desperaron.

Nasus se reincorporó, notablemente rápido.

"Ehlane, usa tu magia de arena..."

"¿Qué quiere que haga exactamente?"

"Localiza magia cercana"

"¿Magia cercana?"

"Sí, la ayuda que solicitó el emperador Azir debería manifestarse tarde o temprano por esta zona... buscaremos esa magia..."

"¿Y cómo pretende que la detecte?"

"........"

"Una cosa es detectar personas o movimientos y otra es..."

Nasus agarró su hombro, imbuyendola brevemente con un poco de su magia y permitiendola sentir los distintos tipos de magia que circulaba por las arenas.

Y la primera que encontró fue enorme...

"Hay una... por allí..."

"¿No es magia tradicional?"

"No... hay algún tipo de magia para nada tradicional..."

Los Viajes de NautilusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora