Parte 7: Las Puertas de Luto

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Quedan 71 días para salvar la navidad...

Tras un encuentro con la llamada Legión Trifariana, un grupo de guerra Noxiano que merodeaban por esas zonas de Valoran...

Nautilus había estado caminando toda la noche y ahora se había parado en una zona algo más montañosa para que Nunu desayunara.

"¿Y no te cansa andar toda la noche?"

"¡No padezco de cansancio!"

"¿Tampoco quieres una manzana?"

"¡Tampoco tengo por qué comer y de todos modos no sabría a qué sabe!"

"Por lo general Nauti me acompaña en los almuerzos, pero no participa"

"Wuaaaahhh"

"Sí, suena un poco triste"

"¡Toda existencia es triste! ¡Al menos hasta que deja de serlo!"

"¿Cómo?" - preguntó inocentemente

"¡Encontrando algo por lo que vivir! ¡Supongo!"

"Ya veo..."

"¡O simplemente morirte!"

A veces esos remates solían pesarle un poco al pequeño chico, que por fortuna contaba con la compañía de su amigo yeti.

"Entonces... ¿a dónde vamos ahora?"

"Según el mapa... para abajo y luego a la izquierda..."

"¡Wuuuaaaahhh!"

"Quizás deberías dejarme a mi el mapa"

"Nunu, no tienes la edad suficiente, yo por otro lado he navegado por múltiples mares"

"Pero estamos en tierra..."

"La tierra es como el mar, pero sin agua y sin estar húmeda"

"¡Cuando llueve sí se pone húmeda la tierra!"

Mientras miraba el mapa la sirena notó algo que le llamó la atención.

"Oye, Nauti, por el sur está Bandle, ¿crees que podríamos llegarnos?"

"¡¿A Bandle City?! ¡¿Para qué?!"

"Nunu necesita descanso y no puede estar eternamente durmiendo en tu mano"

"¡Tonterías! ¡¿Qué podría pasarle?!"

"Una contractura muscular en el cuello o espalda"

"¡Para eso tiene al yeti almohada!"

"¡Wuaaaaaahhhh!" - negó el monstruo nevado

"A Willump no le gusta que le llames así"

"Nauti, discúlpate con el yeti"

"¡No pienso disculparme con ese yeti! ¡No lo hice con aquel chacal humanoide de Shurima y tampoco lo haré con un yeti!"

"Nauti, debes mostrar modales delante del chico"

"¡Es solo un yeti! ¡Que muestre primero algo de inteligencia!"

Willump generó varias bolas de nieve que empezó a lanzar al aire mientras hacia malabares. Esto desde la perspectiva de Nami y Nautilus era la cúspide de la inteligencia.

"¡De acuerdo! ¡Retiro lo dicho!"

"¿Eso significa que puedo usar el mapa?"

"¡No! ¡De eso se seguirá encargando Nami!"

"¿Por qué?"

"¡Es una sirena! ¡Mitológicamente tiene ventaja!"

"¿Ves? Mitológicamente tengo el poder de hundir barcos"

"......."

Mientras esto ocurre, a lo lejos, la Legión Trifariana está organizándose mientras son sermoneados por su general en funciones Kled.

"¡Os dije que tendríais que haberles frenado!"

"Señor Kled..."

"¡General comandante capitán Kled!"

"¡Skaaaarrr!"

"General Kled... no podíamos hacer nada contra uno de los principales aliados de Lord Swain" - le dijo el Capitán Ferron

"¡¿Cómo dices?!"

"Obedecíamos prioridades de Lord Swain" - explicó un minotauro de la legión

"¡¿Y cuál es la diferencia ahora?! ¡Eh! ¡Aurok!"

"Yo soy la diferencia..."

Un enorme guerrero con hacha en mano apareció acompañado por dos soldados que poseían armaduras similares a los de la legión.

Uno de ellos llevaba un hacha consigo mientras que el otro portaba granadas.

"Mads, Gerald... descansad..."

"Sí, señor..." 

"Lord Darius..." - se inclinó rápidamente el capitán

"Hola, Ferran... general Kled..."

"Oh, si es el joven Darius, ¿qué te trae por aquí?"

"Soy el líder de la legión Trifariana" - le dijo en seco - "Soy quien toma las decisiones aquí si no está Swain"

"¡Skaaaarrrr!"

"Eso mismo" - se quejó el yordle - "¿Qué demonios vas a hacer ahora?"

"Gerald... soldado raso..." - señaló a ambos - "Se aproximan a las Puertas de Luto, id y seguidles hasta donde sea necesario"

"Lord Darius, ¿qué tiene en mente?" - preguntó Gloria

"Podría ser nuestra oportunidad de encontrar Bandle..."

Los Viajes de NautilusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora