Los Viajes de Nautilus

Parte 188: Pequeña brujita

Annie se había levantado algo más tarde que los adultos, quienes parecían estar algo molestos por la desaparición de la Nami del Pasado o NamiDos.

Ella, junto con Nunu y Willump, se alejaron un poco de ellos, buscando entre arbustos.

"¿Seguro que no se lo dejaste a Nilah?"

"No, y le dejé claro que no lo cogiese"

"Pero quizás lo cogió"

"Ella no me lo quitaría sin decirme nada"

"La conoces desde hace días"

"Nami confía en ella, y ella confía en Nami lo suficiente como para hacernos algo de caso"

"Wrruaaaah"

"Yo estaría más preocupado por la desaparición de NamiDos"

"¿Por qué?"

"Porque es Nami... del pasado, pero Nami"

Annie pensó en ello brevemente. Era cierto que se preocupaba por Nami, pero...

Quizás estaba pensando más en el presente. Esta aventura no dudaría mucho y si encontraba su libro... quizás podría usarlo para estar más con ella y Nautilus...

Un motivo algo egoísta, pero para una niña tiene cierto sentido.

"Wrruraaahh"

"Yo tampoco veo ese libro"

"Quizás lo hayan..."

"¿Ocurre algo?"

"Noto algo..."

"¿Notas algo?"

"Sí... Nunu, ¿no notas nada en esa dirección?"

El joven freljorniano se enfocó en el punto en donde señalaba su amiga.

Tal vez fuera por su poco uso, pero su magia no estaba tan desarrollada. Aun así logró sentir aquello de lo que hablaba Annie.

"Es... magia..."

"¿Magia?"

"Sí, hay una especie de rastro de magia"

"Wrruaaaah"

"No puedes ir solo, Willump podría ser peli... ¡Annie!"

"¿Qué?"

"¡Vuelve aquí! No vayas sola"

"Pues ven conmigo y no estaré sola"

"Pero... puede ser peligroso..."

"Yo tengo a Tibbers y tú un yeti, ¿qué tan peligroso puede ser?"

"Deberías hacer caso a tu amiguito"

"¿Mmm?"

Los Centinelas de la Luz por su parte habían estado hablando con el resto de campeones, quizás un poco irritados.

"Te digo que esa sirena ha robado el libro"

"Ya estamos, falta mi doble atemporal y ha tenido que ser ella"

"¿Quién sino iba a hacer algo así?" - preguntó Senna

"Quizás vuestra centinela" - dijo Nilah - "Tampoco la veo por aquí"

"Maeve jamás haría algo así"

"¿Y cómo estás tan seguro?"

"La conozco desde niña, ella no es una ladrona"

"Pues parecía que la tratabais como una centinela de relleno"

"Eso no es cierto"

"Siendo sinceros lo parece" - admitió Riven - "Yo soy una campeona y aún así me hacéis sentir que sobro"

"Duras declaraciones por parte de tu equipo, hermanita"

"No empieces..."

"Haz caso a lo que la sabia de tu hermana mayor dice"

"¿Cómo que hermana mayor?"

"Tengo más de cincuenta años vivido, así que te gano... y a mi me gana Karthus"

"¿Quién?"

"Karthus"

"........"

"Después te explico" - le dijo Lucian - "Yuumi, ¿qué opinas?"

"Pues... no conozco a Maeve... pero quizás NamiDos haya sido..."

"Yuumi, ¿muerdes la mano que te da de comer?"

"Ella quería regresar a su línea de tiempo, y casualmente ha desaparecido junto al libro que sirve para transportar..."

"¡Eso tiene mucho sentido!"

"Odio que tengas razón, Nauti"

"Espera..." - habló la líder de los centinelas - "¿A ellos les haces caso y a mi no?"

"Evidentemente"

La paciencia de la mujer tenía un límite, que parecía estar por quebrarse a causa de la marai. Al menos hasta que vio a...

¿Morgana y Veigar junto a los niños?"

"¿Quienes son esos?"

"¡Veigar! ¡Tiempo sin vernos!"

"Nautilus... nos vimos apenas hace una semana... o algo más..."

"¡Eso es mucho tiempo!"

"Realmente no, no lo es"

"Odio estropear el reencuentro... pero ¿habéis visto un libro y una sirena igualita a mi?"

"Una segunda Nami no..." - se extrañó Morgana - "Pero respecto al libro... tenemos malas noticias..."