Piso

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Habla Cris

El anuncio de Bershka me fue fenomenal. Al día siguiente Joana fue a clases y yo concerté visita con unos pisos por la tarde. Cuando llegó de la universidad comimos y fuimos a ver varios pisos. No veíamos ninguno que nos acabara de convencer y Joana empezaba a perder la paciencia hasta que al final vimos uno que nos enamoró. Era pequeño pero tenía dos habitaciones, una cocina estilo americano y piscina comunitaria. Lo mejor es que estaba bien de precio. No lo dudamos no un momento. Encima estaba totalmente amueblado. Nos lo quedamos. Ambas estuvimos de acuerdo y muy ilusionadas cuando vimos el piso.

Esa semana tuvimos que enviar papeleo para entrar al piso y Joana empezó el trabajo. De momento estaba contenta de poder trabajar, pero veía que iba acumulando cansancio porque llegaba a las 2 de la mañana cada día de trabajar y se levantaba a las 6 y media para ir a la universidad. Me preocupaba...

La siguiente semana entramos al piso por fin. Agradecí mil veces a la madre de Joana que me hubiera cuidado y dejado estar en su casa esa temporada. La primera noche se hizo un poco extraño.

J- estoy nerviosa y todo de estar en el piso por fin
C- relájate cariño, a partir de ahora será nuestro hogar :)
J- es súper bonito
C- sii, tendríamos que dar una fiesta de celebración no? El fin de semana?
J- vale pero sin armar mucho jaleo... no quiero empezar con mal pie con los vecinos
C- no, algo íntimo, no quiero que venga mucha gente
J- vale :) voy a estudiar un poco vale?
C- vale amor

Era martes, Joana tenía fiesta del trabajo, aprovechaba para estudiar al máximo ese día. Pero no le era suficiente, estaba en la universidad y las cosas eran difíciles. Iba a estar muy pendiente de Joana y no iba a dejar que le pasase nada, si tenía que dejar de trabajar lo dejaría, pero no quería que se agobiara y que su salud se perjudicara por esto, y menos ahora que a mí me iba bien económicamente.

I Follow Rivers (II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora