Capitulo 69:

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Dani estaba nervioso. Un mensaje en plena clase le había llegado, era de Adrian. Sin dudarlo, Dani desbloqueo su celular a ver que era lo que quería.

Por otro lado Sebastián fulminaba a Dani con la mirada. ¿Como era posible que de estar acostado, casi dormido, se haya puesto así? Sebastián intento ver que era lo que Dani texteaba, pero dani en cuanto sintió movimiento, envió el mensaje y apagó su celular para ver a Sebastián que casi estaba encima de él intentando ver que era lo que había en el celular.

—¿Quien era?—Preguntó Sebastián frunciendo el ceño y mirando a Dani esperando una respuesta a su pregunta.

—Mi mamá—Contestó Dani casi al instante—Quiere que llegue temprano a casa porque encontró una rata en mi habitación—Dani no se sentía orgulloso de mentir, pero era mejor que la verdad—Y tú, que chismoso eres ¿Por que quieres saber quien me habla?—Se mofo Dani de Sebastián y este se mostró sorprendido y acorralado.

—Es que...—Sebastián se rascó la nuca—Te veías preocupado.

—¿Preocupado yo?—Dani fingió demencia—Así me va a ir en la casa—Dani sonrió, era la primera sonrisa que le veía Sebastián a Dani hoy.

Dani volvió a desbloquear su celular, este abrió mensajes. Dani se quedó con la mirada perdida en el celular.

"Hola mi amor. ¿Quieres que vaya por ti a la escuela? Yo se que si. Estaré puntual para ti en la entrada de tu colegio, espero que salgas temprano, sino me pondré triste y me molestaré ¿Okey?" Maldito manipulador, fue lo que pensó Dani. El había enviado un okey por respuesta y hasta ahí se quedó la conversación.

Dani dejó el teléfono y comenzó a garabatear su libreta, no pensaba en nada, pero el gastar la pluma en la hoja lo relajaba.

Las clases por fin terminaron, Dani salió corriendo en cuanto toco el timbre, sabía que si algún idiota llegaba a la entrada antes que el, le iría muy mal.

Efectivamente, Dani fue el primero en salir, su novio estaba recargado en la reja de la entrada. Dani casi corrió hacia el y lo tomó de la mano para llamar su atención, el estaba en su celular.

—Tardaste—Fue lo único que dijo adrian y Dani bajó la cabeza, sabía que eso no era cierto, el fue el primero en salir.

—Lo siento—Dijo Dani hipócritamente, no sentía nada, porque ni siquiera llegó tarde.

—Está bien, sígueme—Sin esperar respuesta, Adrian ha jalado a Dani con el y este solo lo seguía.

Caminaron mucho, bastante al parecer de Dani, pero ni como reclamarlo.

—Te tengo una sorpresa mi niño—Adrian beso su frente y Dani frunció el ceño, ¿Una sorpresa? De parte de él no sería nada bueno.

—¿Que es?—Dani miraba con detenimiento a Adrian y este sacó de su mochila una barra de chocolate.

—Toma—Adrian le ha extendido a Dani la barra de chocolate y este lo tomó dudoso.

—¿Un chocolate?—Dani había imaginado alguna cosa horrible, pero un chocolate no asusta a nadie.

—Un delicioso chocolate—Adrian sonrió orgulloso—Es un chocolate caro, así que cómelo despacio—Dani frunció el ceño.

—Muchas gracias—Dani ha guardado el chocolate en su mochila.

—¿Por que no lo comes ahora? ¿No te gusta?—Adrian fulmino a Dani con la mirada.

—No es eso—Dani negó con la cabeza—No tengo hambre ahora, lo guardaré para más tarde—Dani ha bajado la cabeza, sabía que la siguiente etapa de su novio era la paranoia, pero por suerte Dani ya sabía controlar eso—Me hubieras dicho que tenías un regalo, así yo te hubiera comprado algo.

La paranoia de Adrian fue olvidada.

—¿En serio? Yo se que puedes darme para hacerme feliz—Dani supero la etapa de "paranoia", pero entro en la etapa de "calentura", por suerte, también sabía cómo persuadirlo aquí.

—¡Mira eso!—Dani ha apuntado a la nada, a lo que adrian frunció el ceño, Dani buscaba algo en la dirección en la que apuntó, para su mala suerte, no había nada impresionante.

—¿Que?—Preguntó Adrian. Dani vio un perro callejero y tuvo que aferrarse a él, ya que no había otra cosa.

—El perro—Adrian miro mal a Dani.

—¿Que tiene el perro?—Adrian parecía estar enfureciéndose.

—Tumbó el bote de basura—Adrian apretó la muñeca de Dani.

—A mi que me importa lo que haga un perro sarnoso—Adrian se acercó peligrosamente a Dani, pero no con fines galantes, sino con intenciones violentas.

—Que fue genial, ¿No lo viste? Saltó tan alto qu...—Dani no terminó su oración por que Adrian ya estaba pellizcando su brazo—Suéltame por favor—Chillo Dani—Me duele.

—¿Eso es lo que vale tu atención?—Soltó indignado Adrian—¿Un perro tirando un basurero? ¡¿Prefieres ver un perro tirando un basurero que prestarme atención a mi?!—Adrian golpeó a puño cerrado a Dani.

Adrian es un poco drástico, además de bipolar, violento y manipulador, Pero no hay nada que Dani pueda hacer para cambiarlo, lo único que puede hacer es soportarlo.

—Y-Yo... L-Lo S-Sie...—Dani se vio interrumpido por Adrian.

—Siempre haces todo lo posible por sacarme de mis casillas—Adrian enderezó bruscamente a Dani jalándolo de su camiseta—¿Disfrutas hacerme enojar? Tan Bueno que soy contigo y me tratas así—Adrian arrugo la nariz—Eres malo Dani, yo tanto que te quiero y tú me tratas así.

A Dani le parecían irónicas sus palabras, después de todo, el lo había golpeado primero, pero en fin.

—¿No vas a responderme?—Adrian frunció el ceño y jalo el cabello de Dani—¿Por que no me dices nada?—Adrian afirmó el agarre y jalo más fuerte el cabello de Dani, este intentaba alejarlo, empujándolo hacia el lado contrario con sus manos, pero adrian no le cedía.

—P-Por favor suéltame—Intento decir Dani seguro de si, pero termino tartamudeando.

—¿Y qué pasa si no quiero?—Contradijo adrian prepotente y burlón.

—Que no oíste—Dijo una voz ajena a esos dos—Te dijo que lo sueltes

Mi TíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora