Mi Tío

Capitulo 85:

Linda para ustedes <3

Quería que se pareciera a Marivel guardia pero salió como la mamá de marinette. Igual me quedo maso así que cuájense.

Tambien, feliz cumpleaños a la putigolfa que me roba los stickers blast_roy  y asi.
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Fernando estaba sentado a un lado de la puerta de la habitación de Sebastián, eran las 2 de la mañana, pero Fernando estaba decidido a que Sebastián saldría en algún momento, y cuando saliera, le pediría disculpas por haberse propasado de esa manera, ese era el plan.

La espera era larga, Sebastián tal vez estaba dormido, y Fernando estaba a punto de caer también ahí en el piso. Fernando estaba tan aburrido, pero se negaba rotundamente a dejar ese sitio sin siquiera haber visto a Sebastián, así que se levantó e puso la cafetera a hacer café. Mientras este se hacía, Fernando seguía atento a cualquier movimiento de la puerta de Sebastián, pero esta obviamente seguía cerrada.

Cuando el café se había terminado de hacer, llamaron a la puerta. Fernando estaba algo desconcertado, ya que, que alguien llame a la puerta a las dos de la mañana no era algo usual, es más, Fernando ni siquiera debería abrirle a esa persona que toca timbres a las dos de la mañana, pero Fernando tenía algo de curiosidad de quien llamaba a su puerta en un miércoles a las dos de la mañana.

Fernando cuando ha terminado de prepararse su café, ha ido a abrirle la puerta a ese extraño con su tasa de café en mano.

Fernando abrió la puerta, encontrándose a su madre en pijama, lo cual, ha confundido a Fernando.

—¿Que haces aquí?—Los pensamientos de Fernando fueron a lo peor, Fernando pensaba que alguien se había metido a robar a casa de su madre o que se había quemado o algo así, pero linda se veía tranquila, se veía mas adormilada que viva.

—Sebastián me dijo que viniera, ¿Paso algo?—Fernando abrió grande los ojos y dejó pasar a su madre, comprendiendo que simplemente venía a apoyar y aconsejar a Sebastián.

En cuanto Linda entró a la casa, Sebastián ha salido de su cuarto con dos maletas, listo para irse del lugar.

Fernando ha mirado desconcertado a Sebastián.

—¿Que haces?—Pregunto Fernando al ver a Sebastián con todas sus cosas.

—Quiero irme con mi abuelita—Sebastián se puso atrás de Linda, y esta lo miraba con una cara de sorpresa.

—¿Por que?—Preguntó Linda—¿Que ha pasado entre ustedes dos?—Ninguno de los dos le ha contestado nada a Linda—Mi amor—Linda se ha dirigido a Sebastián—Yo no puedo hacerles esto, no puedo separarlos por una simple riña qué tal vez no tenga importancia, así que, por que no mejor simplemente vienes a dormir conmigo hoy y mañana regresas para arreglar las diferencias, mañana estarás más calmado y verás todo con claridad, ¿Te parece? —Sebastián arrugó la nariz y miró suplicante a su abuela, pero al final Sebastián ha terminado por ceder irse simplemente una noche.

Con Fernando han batallado más, Fernando se negaba a que Sebastián se fuera aunque sea simplemente por esa noche, pero ha terminado por aceptar, ya que linda le ha dado buenos argumentos, después de todo, Linda tenía razón, Sebastián y el estarían más calmados y verían todo con claridad mañana en la mañana.

Fernando y Linda se han puesto de acuerdo, Fernando irá por Sebastián después de la escuela y regresaría a su casa, y si su riña no se logra solucionar, Sebastián regresaría a casa de Linda una noche más.

Cuando todos se pudieron poner de acuerdo, Sebastián y linda han dejado el lugar. A Fernando le desagradaba que su pequeño no estuviera bajo su techo, pero tenía la certeza de que mañana todo se resolvería con palabras, así que Fernando si ha apoyado la idea de que Sebastián se fuera.

Fernando, algo aturdido y frustrado, se ha ido a dormir, sintiendo como que cualquier cosa pasaría si Sebastián no se encontraba con el.

Al final, Fernando ha conciliado el sueño, con el pensamiento de que entre más rápido se durmiera, más rápido vería a su pequeño de nuevo.

Fernando hizo su día normal, se levantó, hizo su desayuno, se arregló para ir a su trabajo, y fue.

Fernando contaba las horas para ir a recoger a su pequeño de la escuela, estaba tan ansioso que le daban ganas de sacarlo de la escuela sin ninguna razón, tenía ganas de decirle que lo extraño mucho y pedirle perdón, tenía ganas de consentirlo como se merecía.

Cuando por fin Fernando terminó de trabajar, se dirigió rápidamente a la escuela de Sebastián. Estuvo ahí una hora, veía a todos sus compañeros salir pero nunca lo vio a él. Incluso vio a Dani, que cuando lo ha visto, ha corrido hacia el auto de su papá.

Fernando se ha preocupado, ya que Fernando asume que Sebastián ha salido a escondidas para no verlo, lo cual pone a Fernando triste, pero el no se daría por vencido tan fácil.

Fernando ha ido a casa de su madre, ya que si Sebastián no estaba ahí, estaría en casa de su madre.

Fernando ha estacionado su auto frente a casa de su madre, pero grande fue su sorpresa al ver un gran letrero que decía "en venta" pegado al portón de la casa.

Fernando se ha alarmado, pero ha intentado no perder la calma. Fernando con su celular ha llamado a Sebastián. El timbre del celular ni siquiera había sonado, inmediatamente después de marcar, sono la contestadora, diciendo que el número al que marcaba no existía. Fernando ha intentado con el número de su madre, pero lo mismo ha pasado con este.

Fernando optimista, ha pensado qué tal vez no tenía señal, así que ha marcado el número de cualquier otra persona. Fernando marco al número de una pizzería que tenía guardado en su teléfono. Esta vez, el timbre si sonaba, y en la pizzería si le contestaron.

Fernando rápidamente colgó la llamada y una inmensa rabia se había apoderado de él. Linda se ha llevado a Sebastián. Fernando jamás volverá a ver a Sebastián en su vida.