—Si no te hubieses desmayado ya hubieras puesto en su lugar a la tarada de Valentina— Ha dicho Dani levantándose de su asiento y jalándome de un lado a otro, ya que dice que ha estado muy molesto desde ese día, ya que Valentina se salió con la suya y lo hizo desmayar.
—Si ya— Dani ha estado con lo mismo durante toda la mañana, así que respondo con indiferente ante la euforia de mi amigo.
Mientras ambos hablábamos del tema, ha llegado una compañera del salón. No se como se llama pero se que está conmigo en el salón, ya que su cara me es familiar de este lugar.
Ella ha venido buscándome a mi, ya que con quien se ha dirigido primero es conmigo
—Hola Sebas, me preocupe mucho cuando te desmayaste ayer—Comentó ella, lo cual, se me habia hecho extraño, ya que no tengo la menor idea de quien es ella.
El no saber el nombre de una compañera de clase, que si sabia el mío, y mas encima estaba preocupada por mi salud, me hizo sentir algo culpable por no poder llamarla por su nombre.
—Tengo que ir con la maestra, nos vemos—Dani ha huido de la conversación, levantándose de su mesa y mirándome pícaro, tal vez creyendo que realmente llevaba una amistad con esta compañera.
—Que bueno que se fue, así puedo platicar más a gusto contigo—No sabia que era lo que ella quería o buscaba saber, pero tampoco me incomodaba, ya que, no parecía tener malas intenciones, es mas, puede decirse que es amable por preguntar por mi.
Narrador omnisciente:
Dani iba saliendo del salón, ha dejado a su mejor amigo con lo que él cree alguien un poco mas que su amiga. Dani cree que esta chica y su amigo salen, ya que ella ha sido sospechosamente amable con Sebastián, y que mas podría ser esto mas que interés romántico.
Dani aguardaría a Sebastián desde su usual salón de clase. El receso esta por terminar, y sabe que podrá volver a encontrarse con Sebastián mas tarde, en unos minutos.
Mientras Dani entraba al salón, ha visto a Valentina. Valentina se encontraba sola en el salón, mirando por la ventana, con esa usual cara aterradora de siempre.
El chismoso Dani quería saber que era lo que ella miraba con tanta molestia, así que, sigilosamente se ha puesto atrás de ella, y ha mirado por la misma ventana que ella miraba, hacia la misma dirección para estar seguro.
Valentina miraba horriblemente fijo hacia Sebastián y hacia la chica enamorada a ojos de Dani.
—Que, ¿celos?— Dice Dani, asustando horriblemente a Valentina, la cual, pegó un brinco al notar a ese fantasma atrás de ella.
—Fuera de aquí, estupido chismoso—Valentina ya no estaba asustada, solo era el tonto de Dani. Dani no asusta para nada.
—Das mucho miedo cuando haces esa cara ¿Sabías?—Dani se refería a esa cara que ponía al mirar por la ventana.
—Tú pareces un payaso sin siquiera intentarlo—Dani no era para nada bueno con los momentos serios, a eso se refería Valentina, que Dani solo era una burla poniendo esa cara seria e intentando reprenderla.
—Deja eso, ¿No crees que ya es suficiente? Él ya tiene muchos problemas como para que busques otra excusa mas para molestarlo—Valentina era demasiado cruel con Sebastián, el cual, no ha hecho nada para merecer tal maltrato de parte de ella.
—No sabia que tenía que sacar cita para molestarlo, ¿Cuándo estará disponible? ¿Tú como su bonita secretaria te encargas de su agenda?—Soltó sarcástica Valentina—No te metas en lo que no te llaman, yo decido en que usar mi tiempo—Valentina podía llegar a ser muy necia, por lo cual no entiende razones, o mas bien, finge no entenderlas.
Antes de Dani poder replicar ante este absurdo comentario, ha sonado la campana, la cual indica que el receso ha terminado, y no pudiendo concluir esta discusión.
A los pocos segundos, sus compañeros comenzaban a llegar, todos tomaban sus respectivos asientos y empezó la clase, así que, Dani tambien se ha sentado, decidiendo dejar el asunto inconcluso por ahora.
La clase transcurrió normal, nada extraño.
Después de algunas horas de tortura mental, las clases han concluido, pudiendo así todos marcharse a casa.
Valentina esperaba a la chica con la que habló Sebastián, esto para hablar con ella.
Cuando Valentina logró localizarla, antes de que se marchara, ha ido por ella, la ha tomado del brazo y la ha arrastrado hacia un lugar alejado.
Ya ahí, Valentina fue la primera en decidir hablar.
—Hace rato te vi muy platicadora con Sebastián, ¿Que? ¿Te gusta o que?— Dice Valentina con su postura de siempre, brazo de teterita y mano de mesero.
—Obvio que no, a mi no me interesa el taradito ese; solo lo hago porque me lo pediste—Dice la chica indiferente, ya que, ella solo conocía a Sebastián de vista.
—Pues te lo ligas rápido, igual el plan es más fácil por que no tiene papás, solo vive con una viejita, así que va a ser más fácil que te aproveches de el—Dice Valentina con una sonrisa macabra.
—Cuando te pones así eres imposible—Dice dándole la espalda y alejándose de ella.
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Mi Tío
RomanceSebastian perdió a sus padres repentinamente y su único familiar dispuesto a cuidarlo, su abuela, vive con su tío, pero ellos no tienen una buena relación ¿Que pasara en esta casa de locos?