—Hola cariño que dicha tengo de haber recibido esta llamada.
—Necesito que hagas algo. —respondo seco y cortante.
—Claro amor, sabía que sólo por eso me habías llamado ¿Qué necesitas?
—¿Aún estás en contacto con su amiga?
—¿Carla? sí, aún seguimos hablando, acaso ese no ha sido mi trabajo siempre, mantenerme cerca de ella para sacarle información sobre tu querida Sara.
El desagrado que siente por Sara, se nota en su voz.
—Perfecto, debes ir y averiguar si Sara, se ha comunicado con ella y apenas sepas algo me lo informas.
—Y si no quiero, hace tiempo que no te veo, si tan solo me dieras una oportunidad de estar contigo, aunque sea por una noche. —ruega ella.
—Es una orden sabes que no te puedes negar y espero que cuando volvamos a hablar me tengas buenas noticias, adiós.
—Espera, por favor no tires la llamada...
Ignorando lo que pide le cuelgo.
Keyra ha sido una pieza fundamental es todo esto, gracias a ella tengo toda la información de Sara, e incluso supe desde antes que ese día iría a esa fiesta, no era momento de traerla conmigo, pero todo se dio de esa forma y no quise esperar más, bueno él no quiso esperar más.
El Recuerdo de hace cinco años llega a mí
Gruño al pensar que no voy a llegar a tiempo, pero al pasar unos minutos frenó el auto porque alguien se cruza en mi camino.
Es ella, —Mis cejas se unen—, está en la mitad de la calle, gotas de agua mojan todo su cuerpo al igual que el agua sucia que salpica desde el suelo, la lluvia esta potente, fuertes truenos y vientos comienzan a azotar su débil cuerpo. —Abro la puerta del auto y me bajo, camino en dirección a ella, es tarde, la oscuridad de la noche es aterradora.
Sus piernas se ven débiles y parte de su rostro está cubierto por su largo cabello. Desde acá puedo notar ver como se debilita cada vez más, por lo tanto, apresuro mis pasos para poder llegar antes que caiga al suelo.
Su cuerpo cae en mis brazos, la sostengo y camino con ella hasta el auto, después de adentrarnos al coche, retiro su cabello de su cara, sus pupilas están dilatadas y puedo observar las heridas en sus brazos, se ve tan vulnerable en ese estado.
—¿Quién eres tú? —pregunta con dificultad.
Yo no respondo a su pregunta y tampoco cuestiono sobre quien la lastimo de esa forma, porque ya tengo claro quien ha sido. Esa mujer detestable.
Aprieto el volante del auto mientras voy conduciendo en dirección a un hospital.
Toco su cara y la siento caliente, al parecer su temperatura ha aumentado. También ha empezado a temblar por el frío. Yo me quito la chaqueta y se la coloco encima.
—Gracias, por favor no me dejes morir. —súplica, y luego de eso se desmaya.
—Claro que no lo haré.
Mi angustia se hace más grande por eso conduzco a toda velocidad hasta para llegar rápido al hospital.
Al llegar entro con ella en mis brazos y pido que por favor la atiendan rápido, un enfermero la recibe en una camilla y me pide algunos datos, yo solo digo que la acabo de encontrar en la calle en ese estado y que no sé nada de ella, además de eso les dejo cierta cantidad de dinero para cubrir todos los gastos.
Salgo del hospital y me quedo en el auto hasta el día siguiente, el sueño no llegó a mí y por eso no dormí en toda la noche y tampoco pienso irme hasta no verla salir.
Aun eres una adolescente y no es el tiempo correcto para llevarte conmigo, todavía hay muchos asuntos que debo resolver.
Al ser las nueve de la mañana sale ella, su mirada la lleva a todos lados, tal vez está buscando a la persona que la trajo al hospital, pero jamás me encontrará, no es tan fácil para ella ver donde estoy desde la distancia en la que estamos.
—Desde ese día no he podido olvidar la promesa que le hice, pero me enfurece estar aquí sin saber nada de ti, e incluso sin saber si estás con vida, Sara. —pienso al salir de aquel recuerdo.
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Dark and Light
Mystery / ThrillerElla es un punto intermedio entre la luz y la oscuridad. Ellos son la perfecta combinación del bien y él mal. ¿Quieres saber que pasará en esta historia? Te invito a que pases a leer la historia de Sara, una chica que a pesar de los golpes que la v...