Capítulo 35

48 5 1
                                        

Por otro lado, me inquieta mucho saber quién es la persona que viene en ese auto, ¿Será Noah, o alguno de sus hombres? Desearía poder tener esa respuesta o tan siquiera espero que no sea él.

Aidan, sigue sin hablar, después de haberle dicho que si confiaba en él solo asintió y se dispuso a hacer lo que me había comentado.

Hace ya algunos minutos entramos a una vía en la que el tráfico es algo complicado y aunque sigo pensando que este es un plan estúpido no volví a opinar más nada. Él se ve muy confiado y no logro entender por qué actúa así, si no sabe a quién nos estamos enfrentando, no sabe qué clase de persona es Noah, bueno en cierto punto no sabemos, pero yo lo he visto y su mirada esconde muchas cosas e incluso la muerte y cuando él me dijo lo que había hecho con Roger, confirme mis sospechas, aparte de ser un mafioso también es un asesino, de esos que quizás no les importa ensuciarse las manos de sangre con cualquier persona.

Debo mencionar que Aidan, además es muy buen conductor porque a pesar de todo este tráfico no se ha quedado estancado o ha tenido ningún tropiezo con algún otro automóvil, aunque me asusta un poco el hecho que ahora sí está aumentando la velocidad.

Yo estoy pendiente del otro auto y por más que Aidan ha tratado de dejarlo muy atrás o perdernos, este aun nos sigue persiguiendo y cada vez se aproxima mucho más por lo cual estoy a punto de confirmar que yo tenía la razón y entrar por esta vía no era nada seguro.

—¿Qué haces, porque te diriges hacia ese lugar? —pregunto al ver como Aidan, gira el auto para entrar a lo que parece ser un lavadero de coches.

—Dijiste que confías en mí cierto.

—Sí eso dije, pero...

—No hagas eso entonces.

—¿A qué te refieres? —incurro confundida.

—Dudar, no quiero que digas que confías en mí y que después sientas dudas de lo que puedo hacer.

—Lo siento, no quise hacerlo, es solo que estoy preocupada.

—No te disculpes, tampoco quiero que hagas eso, y no te preocupes que todo va a salir bien.

Yo quise hablar, pero cerré mis labios ya que Aidan ya había entrado al lugar y lo menos que quería era que se distrajera de su objetivo.

Después de haber entrado al sitio, él toma nuestras cosas y baja del carro y yo hago lo mismo, me agarra por la mano y me arrastra por un callejón que se encuentra algo solitario, se me comienza a hacer un poco extraño que no le digan nada y que él conozca tan bien el lugar, hasta que se acerca una persona y le comenta en breves palabras que necesitaba que laven el coche por fuera y por dentro y después llamen a un número que él le entregó y que pregunte por Nef.

Ambos miramos hacia atrás y observamos que no viene nadie, lo cual es un alivio, sin embargo, sé que están cerca y me preocupa es el hecho de saber ¡Cómo rayos vamos a salir de aquí?

Después continuamos caminando hasta que el hombre llama a Aidan.

—¡Aidan, espera! —grita el desconocido.

—¿Qué sucede? —responde Aidan.

—¿Todo está bien?

—Sí, pero si te preguntan por mi o por ella solo responde que te hicimos ese pedido y que nos fuimos, y no menciones el nombre de Nef, por favor.

La persona asiente y para mi todo se aclara un poco, Aidan al parecer conoce a ese hombre y sabe cómo salir de este lugar sin que usemos el camino por donde entramos.

Yo sabía que no íbamos a durar mucho tiempo en el carro que el amigo de Aidan nos prestó, pero no imagine que eso pasaría tan rápido y muchos menos porque nos siguen.

Nosotros seguimos caminando hasta que al final nos topamos con otra calle, una luz de esperanza llegó a mí, pero en tan poco tiempo fue esfumada cuando escuchamos de cerca un disparo.

Dark and LightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora