Oblivion |Época De Los Merodeadores|

Nota final

Lo hemos logrado. 

Hemos llegado al final del trayecto. Juntos. 

No sé cuántas veces he desaparecido y os he dejado en vilo esperando. Aún así muchos os habéis quedado. No os voy a ocultar las cosas; las ganas de terminar esta historia o siquiera seguirla se me han ido muchas veces, pero el cariño que le tengo y con el apoyo que vosotros habéis brindado la he sacado adelante tal y como lo pensé cuando se me ocurrió la primera vez.

Os quiero dar las gracias a todos por leerla, por vuestros fantásticos comentarios y por las risas y las alegrías que me habéis traído con ellos; por los mensajes por privado que me habéis mandado deseándome lo mejor y por vuestro arte inspirado en esta historia. La idea de este fanfic surgió cuando yo tenía 14 años, en una clase de biología. No estaba atendiendo, como podéis haceros a la idea y en lugar de anotar lo que decía el profesor usé el cuaderno para escribir ese primer capítulo donde una pequeña Hesper de 11 años contempla Hampsted desde su ventana poco antes de entrar Jody. No tenía pensado hacer algo tan largo, pero ya veis en lo que ha derivado. 

No solo quería agradeceros que leyerais Oblivion y que todavía haya gente uniéndose a nuestro rincón de Wattpad, sino también por haberme acompañado en mi viaje con la escritura. Oblivion ha sido mi terreno de experimentación; aquí he tenido la oportunidad de cometer errores ortográficos, sintácticos y semánticos que con solo echar un vistazo a los primeros capítulos me da esa inevitable  vergüenza ajena; y ya ni hablemos de las notas de autora que solía escribir. Os prometo que no sabéis lo que este fanfic me ha ayudado en lo que ahora puedo llamar mi forma de narrar; y la confianza que me habéis dado con esos estupendos comentarios incluso en los capítulos peor escritos ha sido un factor fundamental.

Una de las razones detrás de mis constantes desapariciones fue la puesta en marcha de un proyecto por el que apuesto mucho. Es un proyecto que no habría surgido si esta historia no se hubiera creado antes. Tenéis mi palabra de que cuando salga a la luz, reconoceréis que es mío; quienquiera que recuerde algo de lo que este fic le ha causado, encontrará una referencia en ese proyecto y se dará cuenta de que fue creado de la misma pluma que Oblivion. Una de las pistas, es que un personaje se llama exactamente como nuestra amiguita de aquí. 

He llorado de la nostalgia con este último capítulo; hemos pasado de ver a Hesper con 11 añitos, haciendo chiquilladas con Gus en la casa de sus padres, a tener a esta chica totalmente diferente que ha batallado lo justo e injusto. Ha sido un camino largo desde 2016; casi cinco años. Los primeros fueron de capítulos casi diarios y los últimos fueron de falta de inspiración. Y, sin embargo, aquí estamos, con el fin de la niñez de Hesper y sus amigos. 

Varios de los personajes que han cobrado importancia en esta historia no iban a ser sino puentes con los que poder dar continuidad al fic o introducir algo, para luego seguir sin ellos. Pero se han quedado. Evan Rosier es el mayor ejemplo; en un principio, Evan solo iba a ser la catapulta de Hesper para poder continuar la historia de esta, pero ver como lo quisisteis me hizo cogerle cariño y luego fue prácticamente imposible deshacerme de él. Evan se convirtió tan parte de Oblivion, que el título se volvió una referencia a él.

No me malinterpretéis; no es que Hesper siguiera teniendo sentimientos por él sino que Evan siempre será alguien especial; ella tuvo la oportunidad de conocerlo en un momento donde ambos eran niños, no les hacía falta fingir sus sentimientos para crear la amistad que más adelante tendrían. Oblivion es el dolor de Hesper al verse obligada moralmente a apartar a alguien que ha contribuido tanto en su vida.  

Y me fascina la relación que ha surgido con Sirius, también. Hubo un momento en medio de la historia donde pensé en dejar a Hesper sola, pero después de todo por lo que la he hecho pasar, Sirius era una estrella que quería regalarle a esta señorita que tanta emoción ha despertado. 

Si hay algo que de verdad entristece de este final es que estamos despidiéndonos de un capítulo tierno y tormentoso de la vida de estos personaje y es su niñez y adolescencia. Los habéis visto llorar, amar y hacer cosas que se quedarían cortas si solo las calificásemos de malas. Hesper es un personaje que ha tocado todas las dimensiones de su humanidad y vosotros sois testigos de ello. 

Además, hubo una cosa que nunca planeé y eso fue hacer esta historia algo tan personal y profundo. Iba a ser un simple fanfic para pasar el rato y en cambio hemos acabo siendo espectadores de la vida de personajes inexistentes. Gracias, en serio; habéis sido los mejores compañeros de lectura que nunca he llegado a conocer. Y os pido también perdón por las desapariciones y por la imposibilidad de no poder responder a todos vuestros comentarios.

No voy a hacer esta nota tan larga; llegará un día en el que vaya a eliminar esta cuenta y reservar este periodo de tiempo como un bonito recuerdo que solo los que llegamos a presenciarlo conservemos, pero aun falta mucho para eso.

Habré escrito yo esta historia, la habré imaginado, pero es vuestra. Os la habéis ganado. Especialmente para aquellos de vosotros que lleváis aquí desde el principio, interactuando conmigo y sintiendo en piel propia todo por lo que pasaba Hesper. En realidad, cualquiera que llegue hasta aquí ya es parte de esta bonita historia. 

Por fin vais a poder ver esa etiqueta de historia terminada al lado de este increíble viaje.

Gracias, gracias, mil gracias.