—"Esta chica necesitaba claramente comer."— Seth se hace presente en su mente.—"El siguiente sos vos."— Asegura del mismo modo.
Se escucha a seth suspirar.—"Siempre dejas salir al imbécil de Deaton."— Se queja y eso hace que el morocho suelte una pequeña carcajada negando con la cabeza.
Blaire lo mira arrugando el entrecejo.
—"Es cinco veces más que tu tamaño y no se conforma con simples demonios."— Le recuerda burlón.
—"Como sea, pero necesito salir y comer algo este cuerpo es demasiado puro para mí."— Suspira frustrado.
Arden vuelve a sonreír.
—¿Por qué esa cara?— Cuestiona divertida.
—¿Satisfecha?— Bromea, Arden, bebiendo su cerveza, mientras que Blaire finaliza de degustar sus papás fritas.
Ella lo mira algo ruboriza...
Claro, que estaba satisfecha pero no de las papas fritas sino de lo que había sucedido hace varios minutos antes con ellos dos.
No lo admitiría, ni tampoco, lo diría en voz alta, estaba algo avergonzada de que le hubiera gustado aquello, realmente estaba ruborizada de verlo a los ojos, porque recordaba en sus ojos tan penetrantes lo que habían compartido.
—Me sorprendieron, estaban ricas.— Admite bebiendo su agua, y luego mira hacia otro lado para evitar el cruce de ojos.
Arden sonríe de costado.
Notaba su incomodidad al mismo tiempo que notaba como ella se encontraba de mucho mejor humor de lo que la había visto en bastante tiempo.
—Creo que son una de las mejores chatarras que probé jamas.— Admite risueño.
Blaire se sorprende, ya que Arden no parece ser de esos demonios que frecuenten la comida chatarra.
—¿Venís seguido?— Indaga curiosa.
Él hace un movimiento con sus labios pensando su respuesta con mayor exactitud. —Suelo venir cuándo me quiero ocultar de Hakeem.— Bromea.
La pelirroja se sorprende nuevamente.
Arden la mira divertido por sus reacciones.
—Pense que eran mejores amigos.— Comenta burlona.
—Lo somos.— Asegura moviendo su vaso.
—¿Entonces?— Sonríe. —¿Por que querrías ocultarte de el?— Sube sus hombros.
—Él es mí guardián y por lógica suele estar pegado a mí cuidando mí espalda, y para alguien que es demasiado arrogante cómo lo soy yo, a veces es un poco irritante tener a alguien que quiera cuidar tu espalda cuándo sé perfectamente que puedo cuidarme por mí mismo.— Suspira rodeando los ojos.
Blaire asiente. —Parece buen chico.— Aprieta sus labios.
—Lo es.— Asegura tragando saliva. —Pero puede ser muy intenso cuando se lo propone.— Se ríe.
—Bueno... Supongo que es su trabajo.— Sube sus hombros apretando sus labios nuevamente.
Arden rueda los ojos.
—Hakeem es muy desconfiado, no confía en nadie excepto en mí, es por eso que es muy perspicaz a la hora de hace su trabajo.— Finaliza la explicación con un suspiro.
—No debe ser fácil ser de la realeza, imagino que el pobre Hakeem debe de tener un trabajo difícil, ya iniciando con tu personalidad, creo que tiene demasiado trabajo de por medio.— Bromea ella.
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El Hijo de Hades
FantasyToda tu fe en la humanidad no bastará si subestimas a quién tienes enfrente. Únete a esta historia de Blaire Morel y Arden Abbot en donde ambos aprenderán del otro sin darse cuenta hasta que sea demasiado tarde como para evitarlo. 💎 Portada increíb...