El Hijo de Hades

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Seth continúa con su mirada hacia abajo y hasta, incluso, su propio creador puede escuchar y sentir el temblor de su cuerpo y de su corazón.

Blaire sabe perfectamente cómo es que el nació y cuál fue el motivo de su creación, pero eso no es lo que le aterra, sino el hecho de cómo se puede llegar a tomar las cosas Arden, al recordarle una y otra vez que había expuesto a la pelirroja.

—¿Lo volviste a castigar?— Blaire muerde su labio inferior.

Seth, se mantiene sentado en uno de los cómodos sillones de cuero de la oficina de Hades, mientras que ellos están aún de pie.

Arden sonríe de costado con bastante ironía. —Deberia, se merece cada uno de los castigos por ser un maldito crio.— Bufa.

Ella coloca sus ojos en blanco y toma asiento en uno de los sillones cercanos a los del oscuro, pero manteniendo un poco de distancia, teniendo en cuenta que parecía que le incomodaba su presencia o que claramente estaba más que avergonzado y aterrado.

Arden hace exactamente lo mismo sentándose a un lado de ella.

Sus manos estan completamente empapada de sudor y se sentía un imbécil a tiempo completo, jamás le había sucedido algo de esta índole con ninguna mujer, de ninguna clase en particular.

Y estaba más que seguro de que la vida lo iba a emparejar con alguien de su mismo rango, pero nunca hubiera esperado que fuera la hija del mismo diablo.

Aquella chiquilla pelirroja a la que se le había puesto como misión. Y qué había nublado cada uno de sus juicios por completo.

—¿Por qué está así?— Traga saliva preocupada por la reacción que está teniendo el oscuro.

Seth alza la vista poco a poco hacia ambos, mostrando sus ojos completamente negros.

—Lamento mucho lo que hice, fui un estúpido al no tener la fuerza suficiente para salir de tu cuerpo cuando vos todavía ni siquiera entendías que era tener un oscuro dentro tuyo, yo estaba ahí para protegerte y le fallé a Arden. Eso es algo claramente imperdonable, pero por sobre todas las cosas, es algo que me lastima a mí mismo a todo momento, se puede decir que somos la misma persona, solo que en tiempos lineales diferentes, y ponerte en peligro en una situación como la que tuvimos con Isaac, es realmente algo injustificable de mi parte.— Sonríe burlón.

Blaire parpadea, sí bien, estaba viendo a un pequeño de no más de seis años, la verdad es que el vocabulario que tenía era completamente alucinante, y ni hablar del hecho de que Arden lo estaba intimidando todo el tiempo, observando con muchísima atención cada uno de sus gestos y palabras que salían por sus labios.

—Solo sos un niño.— Susurra.

No cree que lo que estuvo haciendo el semidiós en su casa estuvo bien, incluso, ella misma puso el grito en el cielo cuando se enteró de que Deaton estaba corroborando el castigo para con él

Arden sonríe cínico. —Es un mocoso, qué sabe perfectamente que tiene que acatar una maldita orden, te puso en peligro, yo tuve esta misión desde hace muchísimo tiempo y eso vos lo sabes perfectamente.— Observa por unos instantes a la pelirroja.

Ella asiente, apretando sus labios para dejarlo continuar y no interrumpir.

—Todos mis oscuros hasta ese momento sabían perfectamente qué es lo que tenían que hacer y cómo se tenían que manejar, además de que cuándo nosotros empezamos entablar una conversación, era todo parte del plan para poder tener a uno de mis oscuros dentro tuyo, te volvías cada vez más adulta y tomabas tus propias decisiones, no podía seguir metiéndome en tu camino con pequeñas restricciones que ponía cuando era simplemente un bebé.— Muerde su labio.