—Hola, Thomas, te estábamos esperando y ya te estabas haciendo rogar por tu presencia.— Arden murmura.
Thomas mueve su cabeza hacia un costado. —Quizas es mejor que Blaire se vaya, Hakeem, podrías llevarla.— No lo pregunta.
Lo ordena.
Arden sonríe observando a su mejor amigo para que se quede quieto en su lugar y ni se le ocurra seguir la orden del diablo.
—Ella se queda conmigo. ¿Tenés a quién estaba trabajando con él?— Sisea observando el cuerpo de Issac de forma furiosa..
Thomas sonríe, mira a su hija y luego a Arden.
—¡Chicos, porque estamos haciendo esto tan cliché, no generemos más tensión de la que ya tenemos en este lugar, hagamos las cosas con calma y todos vamos a poder estar en nuestras camas al anochecer!— Hades sonríe.
Thomas, también lo hace. —Tu hijo parece qué quiere proteger a mí hija de mí mismo.— Se burla y mira a su amigo burlón.
Hades le resta importancia con un movimiento de mano.
—Arden está un poco sensible, no tuvo una buena mañana, y la tarde no parece haber mejorado.— Bromea.
Blaire moja sus labios.
No puede entender cómo es que se toma las cosas con tanta liviandad.
—La están mareando, ella no tiene la menor idea de lo que es convivir con ustedes dos, Así que les sugiero que guarden sus sarcasmo de mierda y presten atención a lo que de verdad está ocurriendo a nuestro alrededor.— Arden sisea.
Apretando sus puños.
Thomas y Hades, bufan.
Se había acabado la diversión para los dos, por más de que tuvieran que admitir que el semidiós tenían razón en lo que estaba diciendo y la pelirroja no entendía ni una sola palabra de lo que ellos estaban hablando, tampoco en la forma en la que tenían para dirigirse hacia ellos o hacia los chicos.
—¡Lo lamento, hablaremos, en algún momento, pero no creas qué todo esto es en tu contra, no era seguro qué supieras de mí!— Thomas habla directo hacia ella.
Blaire parpadea. —¿Entonces es cierto?— Susurra. —¿Todos lo sabían?— Una lágrima brota de su ojo.
Arden cierra los ojos, muere por poner su dedo para impedir qué la misma avance hacía sus mejillas, pero se contiene.
Hades, toma asiento en una silla algo mugrosa, incluso, chasquea los dedos con una mueca en su rostro para qué la misma quedé intacta.
—No era seguro para vos, ibas a estar en el ojo de la tormenta, y solamente ahora nosotros cinco lo sabemos.— Thomas continúa alzando sus manos.
Blaire lo mira, quiere poder distinguir qué aquello no es una mentira, qué no es un sueño, qué hay algo en su rostro o en sus facciones qué ella puede ver cómo suyas.
—¿Y Roath?— Tuerce su entrecejo.
Thomas se ríe.
Arden aprieta con más fuerza su agarre.
—Roath estaba condenado, se había acostado con mí mujer, no sé si sabes algo de nosotros, pero cuándo encontramos el amor, es para siempre, querida.— Comienza.
Mirando divertido a los dos.
Blaire siente como Arden se tensa a su lado.
Thomas no le da importancia a cualquiera de los gestos que puede llegar a estar haciendo ahora mismo el hijo de Hades y continúa con su explicación.

ESTÁS LEYENDO
El Hijo de Hades
FantastikToda tu fe en la humanidad no bastará si subestimas a quién tienes enfrente. Únete a esta historia de Blaire Morel y Arden Abbot en donde ambos aprenderán del otro sin darse cuenta hasta que sea demasiado tarde como para evitarlo. 💎 Portada increíb...