El Hijo de Hades

21

—"Al fin te acordáste de darme de comer."— Seth se queja.

Arden rueda los ojos cuando analiza la herida de Blaire. Tiene su brazo estirado y el corrobora que la herida ya esté comenzando a cerrar.

—"Sólo callate Seth."— Ordena.

Claramente no está de su mejor humor.

—"¡Que humor!"— Se burla.

El peliblanco rueda los ojos volviendo a prestar atención a Blaire que, aún, sigue frente a él.

—No es profunda.— Murmura pasando sus dedos por la misma.

Ella abre sus labios y los vuelve a cerrar ante el toque, fija su atención en la herida corroborando que la misma ya no sangra.

Tuerce sus cejas extrañada. —¿Cómo hiciste eso?— Exclama y sube sus ojos hacia los de él.

Arden sonríe burlón.

—Soy un semi dios, muñeca.— Le recuerda irónico.

Blaire traga saliva y pestañea sin dejar de mirarlo.

Arden clava su mirada en sus ojos claros al soltar su brazo.

—¿Ya mostró sus poderes?— Hakeem corta el momento incómodo.

Su amigo se aleja de la pelirroja y carraspea pasando una mano por su cabello.

—Eso parece.— Murmura parpadeando.

—Jamas los muestra.— Admite asombrado de su mejor amigo, quién lo mira rodeando los ojos por lo que acaba de decir.

—Hakeem— Bufa.

Totalmente innecesario ¡Por supuesto!

—¿Que más puede hacer?— Achina sus ojos con intriga.

—Cosas inimaginables.— Admite, divertido, Hakeem.

Mira nuevamente hacia dónde Arden se encuentra dándose cuenta que está en el penthouse nuevamente y que no debería de quedarse más tiempo.

—Ya debo irme.— Aprieta sus labios.

Hakeem sonríe mostrando la bandeja que trae en las manos. —¡Hice chocolate caliente, no podes irte ahora!— Hace un puchero divertido.

Arden lo mira de malos modos. —Hakeem, quiere irse.— Demanda tirándose en el sillón.

Blaire aprieta sus labios.

—¡Es solo un chocolate caliente y Arden te lleva!— Sonríe pestañeando.

Blaire mira al morocho. —¿No te molesta?— Cuestiona apretando sus dientes.

El aludido alza la vista hacia ella nuevamente.

—Te hará bien tomar algo caliente, hace frío.— Sube sus hombros.

Hakeem sonríe cómo un gatito y apoya la bandeja frente a su amigo.

Arden mira fijamente la chimenea que tiene enfrente y la misma se enciende, al igual que el smartv que hay sobre ella.

Blaire mira todo en silencio, mientras que toma asiento frente a Arden, a un lado de Hakeem.

Su celular vuelve a sonar y ella lo atiende, son mensajes de Karim quejándose que no habia respondido con anterioridad a sus preguntas.

—Aburridon está molesto.— Tuerce sus cejas.

Blaire lo mira. —¡No le digas así!— Lo regaña.

Arden sonríe burlón, ya se encontraba de mejor ánimo. Haber peleado con aquellos demonios es lo que necesitaba.