Las apariencias engañan [ yaoi/gay ] +16 *EDITANDO*

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El último día en que tomamos clases Nagisa viene a traerle el almuerzo a Kira al salón, se ha cortado el cabello. Lo tiene por encima del hombro totalmente liso. Cuando lo veo salir del salón me giro para mirar a Kira aprovechando que no había casi nadie en salón ni Arik quien, había salido a conseguir alguna botana de la maquina expendedora.

—Oye, Kira...

Me puse un poco nervioso al hablarle pero me estaba sintiendo demasiado mal por que no nos hablabamos.

—¿Mmnh? —mantiene su mirada en el almuerzo.

—Kira ¿podrías mirarme? —le pido, con ojos cristalizados.

—¿Qué? —esta vez me mira y estoy a punto de echarme a llorar.

—Yo...lo siento, no quiero que sigamos peleados, te extraño mucho —muerdo mi labio inferior mientras evito soltar un sollozo —¿Me p-perdonas? No quiero que dejemos de ser amigos.

El suelta un suspiro.

—No tienes que disculpar te, Sora, yo actúe mal y no debí decirte todo eso. Entiendo que eres a veces muy ingenuo y tonto, pero tampoco debí tratarte de esa forma así que si alguien debe disculparse aquí soy yo.

Me seco las mejillas húmedas de las lágrimas, con rapidez.

—¿No vamos a dejar de ser amigos? —niega con su cabeza y eso alivia mi culpa totalmente —Menos mal, creí que ya no querías hablarme mas.

—Eso nunca pasará, Sora. Eres mi mejor amigo, te amo como un hermano y siempre me tendrás para ser tu ladilla, no te vas ha deshacer de mi jamás —sonrío al escucharlo.

—No te pediría algo así nunca.

Me levanto de mi asiento para rodear su mesa y darnos un brazo. Mis brazos rodean su cabeza rubia mientras sus brazos mi cintura y, me siento mucho mejor por arreglar nuestra amistad. Perder a Kira es como si perdiera una parte de mi. Un grave error que no quiero cometer.

—Me alegra que hayamos arreglado esto —murmura, cuando nos despegamos.

Vuelvo a mi asiento.

—A mi también, me sentía muy mal con todo el asunto —paso una mano por mi cabello.

—Ten, Sora. Te compré esto —Arik regresa y me tiende una bolsa de papas con sabor a queso la cual le agradezco con una sonrisa.

—Gracias.

—¿De qué hablaban ustedes? —pregunta y abro la bolsa para comer de ella inmediatamente.

—Nada que te importe —contesta Kira, borde.

—Me importa porque involucra a mi novio, Kouzomi.

Suelto un pequeño suspiro.

—Ah con que te importa ¿no? —suelta un risa sarcástica y me encogo en mi lugar. Esto va acabar muy mal.

—Así es, me importa. 

—¡Vaya! Eso me sorprende porque recuerdo muy bien que MI mejor amigo te invitó muy feliz a una cena con sus padres y tu nunca apareciste.

—Kira...

—No te metas, Sora.

—Tuve mis razones para no ir, no tengo que darte explicaciones a ti, Kouzomi.

—Oh, por supuesto que no, tampoco a sus padres, no tienes porque disculparte con nadie sin al final te importa muchísimo tu novio.

Muerdo el interior de mi mejilla agachando mi cabeza.