ARIK
—¿Puedes hacerme un favor? —su voz tarda en responderme y aprieto mi mano en puño clavando me las uñas mal cortadas en la palma, con furia.
—Depende —dice y, chasqueo mi lengua.
—Tengo un maldito problema con unos tipos y un encargo y, quiero que lo hagas por mi porque eres cuidadoso y estoy ocupado ahora —me rasco la cabeza de manera nerviosa mientras miro hacia donde están Kira y los padres de Sora.
—Te costará, Arik. Mucho ¿con qué piensas pagarme ahora? —cuestiona y suelto un bufido.
—Te daré lo que sea, solo encargate. Te paso sus nombres.
—Vale, ¿trabajo medio, advertencia o sacar la basura definitivamente? —pregunta.
—Trabajo medio del resto me ocupo yo —respondo.
—Medio ¿eh? Te estás volviendo considerado.
—Solo hazlo y ya. Cuento contigo, Aleik.
—Descuida, sabes que nunca te decepciono, hermano.
Cuelgo.
Me guardo el celular y avanzo hacia donde están ellos deteniendo me cuando veo a Kira ingresar a la habitación y, los señores O'Connell hablar entre ellos de algo que me llama mucho la atención. Me oculto muy cerca de donde están, luciendo como si estuviera esperando algo mientras los espio.
—¿Y qué quieres que haga, Kenta? Mi hijo no está bien y lo sabes, empeora —están hablando de la condición de Sora. ¿Qué es lo que tiene y por qué empeora? Él me aseguró de que no era nada pero sabía que mentía. Era demasiado extraño.
—Nuestro hijo, Tamara. No lo hiciste sola —le regañó su esposo, la mujer suelta un bufido —Pero debemos confiar en lo que nos diga el doctor, haremos lo posible para que vuelva a estar bien y verás que no tendremos que preocuparnos hasta el próximo aviso.
—¿Piensas vivir así el resto de nuestras vida, Kenta? ¿Esperando por el próximo ataque para actuar? No quiero tener que volver a lo mismo, no quiero ver a Sora sufriendo por todo esto; él tiene una vida, Kenta. Tiene amigos, es feliz...quitarle todo eso de la nada solo por lo que tiene, yo...no puedo, no puedo hacerlo.
Parece que está llorando.
—Ya, yaaaa...calmate, Sora estará bien, ya verás que no es nada. Él es fuerte, Tamara. Este fue el que más ha durado en llegar a pesar de todo.
—Sé que lo es pero, tengo miedo y es tan caro el tratamiento. Si después de esto Sora vuelve a caer tendremos que mudarnos, cambiar todo por los gastos de su tratamiento. Limitarlo en todo, alejarlo de sus amigos, de todo...¡No podría vivir así! Esa no es una vida, no para él, no para mi niño.
—Lo sé, Tamara, estoy tan asustado como tu.
—¡Pues no parece! Nuestro niño se nos va, Kenta ¡Se nos está yendo! ¡¿Por qué estás tan tranquilo?!
—¡Calmate! Deja de exagerar, Sora está bien. No te pongas histérica —le dice el hombre.
Me muerdo la lengua mientras sigo escuchando.
Sora está enfermo.
Pero ¿de qué exactamente? ¿Qué es lo que tiene?
—Debes tranquilizarte, Tamara. Ya hablamos de esto, hacemos lo que podemos y más por nuestro hijo y mira todo lo que hemos logrado por él, solo su felicidad. Debes guardar la calma, hazlo por él. Sabes que esto le afecta tanto a él como a nosotros e incluso peor. Tenemos que ser fuerte y él lo será también.
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Las apariencias engañan [ yaoi/gay ] +16 *EDITANDO*
Novela Juvenil(COMPLETA) Sora O'Connell cursaba su segundo año en el instituto cuando llegó un estudiante nuevo, él parecía ser inofensivo e ingenuo, vivía todo el tiempo distraído y en su mundo por lo que Sora no le vió nada malo al acercarse a él para que sean...