*con cada actualización, se me van acabando las ideas jaja este es un poco crack :v por cierto, Oliver es como el Valentino pero de los Beavers 🤔
La ceniza cayó en el arbusto y su madre se daría cuenta de que seguía fumando. Julián aspiraría la ventana más tarde.
—Mil pesos bien gastados— Ciro comentó. Apretó las teclas y chasqueó la lengua.
—Sí, así que me tendrás que llevar comida a la escuela desde mañana. Estoy en la quiebra. Si mi mamá sabe que gasté el dinero que se suponía era para comer, me quedaría sin orejas de lo fuerte que las va a jalar.
—Solo te llevaré comida si me dejas jugar después de la escuela hasta terminar el juego. Ya sabes que mi mamá cree que los videojuegos son del diablo y me obligará a ir a misa.
Julián asintió. Ciro regresó su vista a la computadora. Apagó el cigarro y lanzó la colilla al cesto de basura. Estaba a punto de cerrar la ventana cuando vio al ser más hermoso que había visto en toda su existencia. ¿Estaban lloviendo ángeles o era un hombre extremadamente guapo? El hombre cargó cajas y las llevó adentro de la casa que hasta ese momento estaba vacía. Julián se asomó por la ventana, e iba a caerse si no tomaba distancia, pero, Julián quería seguir viendo al sujeto. Había experimentado el amor a primera vista, pero, no así.
—¿Qué diablos hacés allí? Te vas a…¡Carajo, Julián!
Ciro alcanzó a agarrarlo de un pie. La bermuda se atoró en el marco de la ventana, en un clavo salido para ser exactos.
—¡No me dejés caer! ¡No me dejés caer, por favor!— Julián rogó.
—Es lo que estoy intentando, imbécil de mierda. ¿Querés dejar de moverte?
Ciro tenía la silla encima, por lo que tampoco podía hacer una maniobra para subir a uno de sus amigos más idiotas.
—¡No lo estoy haciendo a propósito!— Julián gritó— Siento que estoy desnudo.
—Tenés las bolas y el culo al aire, tarado— Ciro lo sabía porque la bermuda estaba en las pantorrillas de su amigo.
—¡¿Qué?!— Julián cubrió su hombría, confirmando que sí, nada estaba cubriendo su parte de abajo.
Los chicos de primaria que pasaron en bicicletas por la acera, se rieron a carcajadas, haciendo comentarios hirientes sobre su miembro y grabando. Estos mocosos de ahora, Julián pensó.
—¡Qué pija tan corta! Esto va a ser viral.
—¡Pidan ayuda, mocosos del infierno!
—¿De verdad la tenés así de chiquita?— Ciro se rió.
—¡No!— Julián exclamó— Es de tamaño normal— Julián unió las cejas, claramente humillado— Maldita sea, Ciro, ayúdame.
—¿Qué crees que estoy tratando? Me atoré con la silla y si saco mi pie, la computadora se caerá.
—Gracias por no tenerme en tus prioridades. ¡Me voy a caer!
Julián sintió el verdadero terror cuando el sujeto que había robado su corazón y el causante directo de su desgracia en ese momento, se acercó, con el rostro pacífico, como si un adolescente no estuviese colgando de la ventana, posiblemente a un paso de la muerte si su cabeza golpeaba el piso. Él hombre de origen divino tenía el celular pegado a la oreja. Al menos, no lo estaba grabando.
—¡Súbeme! ¡Súbemeee!— Julián imploró.
—¡Dejá de moverte, la concha de tu madre!
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Historias cortas y otras no tan cortas
FanfictionDrabbles/oneshots de diferentes parejas.