-9 de agosto de 2019.
IAN.
Una semana tranquila.
Eso era lo único que pedía.
Sin dramas, ni tragedias.
Y gracias al cielo, que me la había concedido.
Después de lo de Esther, ya había tenido suficiente.
Maldita la hora en la que se cruzó en mi camino.
Un año después y con una maldita aparición de tan solo 5 minutos, había conseguido volver ha hacerme daño, pero esta vez, a través de Sam.
"Agua pasada no mueve molinos" —Solía decir mi madre. Y que razón.
Así que, dejando de lado el pasado...
Estábamos a viernes. Después de una semana de trabajo intenso, por fin había llegado el fin de semana y no era un fin de semana cualquiera. La lluvia de estrellas estaba básicamente sobre nuestras cabezas desde hacía un par de semanas y estábamos empezando a preparar algunas cosas para irnos el domingo a la casa del monte.
Los días 11, 12 y 13 de agosto, (domingo, lunes y martes) era cuando las Perseidas tendrían su mayor foco de actividad y nuestra familia ya estaba preparada para ello.
Eran tres días familiares, de relajación absoluta, sin el típico estrés que suel traer la ciudad, el trabajo y los problemas generales que solemos tener las personas en nuestro día a día.
Además, Sam y Liam habían tenido un "plan genial" (o al menos así lo llamaban ellos) para que mis padres volvieran a "quererse".
Bueno, o por menos, que volvieran a llevarse bien.
Su plan era simple, consistía en prepararles una cena romántica y conseguir liar a todos los demás para que salieran de noche de la casa del monte a una hora específica. Así mamá y papá se quedarían ellos dos solos, mientras los demás disfrutaban del cielo nocturno, o lo que sea que les diera la gana de hacer en el monte por la noche.
"—¿Ese es vuestro plan? —Les pregunté, entre risas.
—¡Plan genial! —Me corrigió Sam.
—¿Qué esperabas? —Contestó Liam, rebatiendo mi pregunta con otra. —Esto es la vida real, no una película.
—A ver, no es que no crea que no va a funcionar. —Quería confiar, pero en el fondo no las tenía todas conmigo, porque sabía que no era nada fácil que dos personas recuperaran la confianza. Y eso era así en cualquier tipo de relación, en general. —Es simplemente que no se si será fácil que en uno de los tres o cuatro días que estemos allí, de la casualidad de que absolutamente todos estén fuera una noche.
—No necesitamos la noche entera, solo el momento de la encerrona.
—Exacto. —Sam le dio la razón a mi hermano. Había veces que me daba miedo que esos dos locos se llevaran tan bien y estuvieran tan de acuerdo. —Nosotros preparamos la cena, convencemos a Erin, Eric y Axel para que salgan y nos las ingeniamos para que vuestros tíos se vayan también y vuestros padres se queden a solas.
—Oído así, no suena tan fácil... —Liam dudó. —¿No es demasiada gente a la que manipular?
—Somos 3, podemos dividirnos. —Pensé.
—Claro y con vuestros primos, no creo que haya problema, solo tenemos que explicárselo.
—Vale, vale. —Liam volvió ha hablar. —Ya lo veo todo claro de nuevo. Retomamos misión.
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HOPEFULLY [COMPLETA Y EDITADA] ✓
Любовные романыSamantha Watson siempre tuvo muy claro lo que quería. Estudiar psicología en la Universidad de Atlanta, tener a sus amigos de siempre y mantener su vida tranquila. ¿Pero, que pasará, cuando toda esa tranquilidad desaparezca? Antes de comenzar su pr...