Me desperté desorientada.
Al abrir mis ojos me di cuenta de que me había quedado dormida en casa de Ian, pero él no estaba por ninguna parte. Escuché la ducha del baño de la habitación y supuse que se encontraba ahí. Cogí mi móvil para mirar la hora y mis ojos se abrieron en sorpresa al ver que eran las una y treinta y cuatro minutos de la tarde.
¿En serio he dormido tanto?
Tenía la sensación de no haberlo hecho más de media hora. ¿Cómo podía ser tan tarde?
Al bajar la barra de notificaciones de mi teléfono vi unas cinco llamadas perdidas de Nelly junto a mensajes suyos preguntando donde estaba. Imaginé que tendría ganas de matarme, así que salí de la habitación para llamarla.
—¿Nelly? —dije, cuando escuché el teléfono descolgarse. Pero ella no me dejó hablar.
—¿Dónde estás? ¡Estaba preocupada! Llego a casa y no te encuentro por ninguna parte. No me coges el teléfono, ni respondes los mensajes... ¿Pero de qué vas?
Muchas veces le gustaba tomar a ella el rol de hermana mayor.
—Me he quedado en casa de Ian porque no se encontraba muy bien. Pensaba avisarte, pero me quedé dormida.
—¿Y cuándo vas a volver?
—Supongo que...
—Hey. —Ian salió de su habitación y me saludó. Llevaba ropa diferente y tenía el pelo mojado.
—Hola. —Sonreí—. ¿Cómo estás? —le pregunté, dejando a Nelly esperando en el teléfono.
—Mucho mejor. —Sonrió de vuelta—. Si no fuera por ti, seguro que seguiría pareciendo un zombi. Muchas gracias por eso.
—No tienes nada que agradecer. Es lo que hacen los amigos, ¿no? —Él rio y asintió—. Yo siento... haberme quedado dormida en tu cama y haber despertado ahora. —dije, incómoda.
—¿Por qué te disculpas? Tú también necesitabas descansar. —Volvió a sonreír—. ¡Ahora si me muero de hambre! ¿Quieres comer algo?
—Gracias, pero tendría que volver a casa. Nelly quiere matarme —susurré la última frase y él se rio.
—Entendido. Cojo las llaves y te llevo.
Ian volvió a entrar a su habitación y le seguí, quedándome en la puerta.
—¿Estás seguro? No quiero que tengas que moverte de tu casa ni coger el coche si aún te encuentras mal, Ian.
—Sam, lo de que estoy mucho mejor iba en serio. —Me guiñó el ojo y agarró las llaves de encima del escritorio—. ¿Vamos?
Asentí. Me acabó convenciendo porque la verdad era que sí se le veía bastante mejor. No estaba tan pálido como hacía unas horas y le había cambiado la expresión de la cara.
Ian me dejó en casa en pocos minutos y le avisé de que cuando llegara de vuelta, me escribiera para saber que seguía bien.
—Aquí está la desaparecida —dijo Nelly, mientras preparaba algo precocinado para comer.
—¿Qué estás haciendo?
—Lasaña. —Terminó de sacar la bandeja de la caja para meterla en el microondas—. ¿Te has enterado ya de lo que le ha pasado a Eric?
—No, ya te he dicho que me quedé dormida.
—Pues, Axel me ha contado que Eric se ha vuelto a fracturar el tobillo y tal vez tengan que operarlo.
Eso es lo que Liam dijo que podría pasar esta mañana...
—¿Es en serio? —pregunté, sorprendida y preocupada a la vez.
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HOPEFULLY [COMPLETA Y EDITADA] ✓
RomanceSamantha Watson siempre tuvo muy claro lo que quería. Estudiar psicología en la Universidad de Atlanta, tener a sus amigos de siempre y mantener su vida tranquila. ¿Pero, que pasará, cuando toda esa tranquilidad desaparezca? Antes de comenzar su pr...