HOPEFULLY [COMPLETA Y EDITADA] ✓

62. La Fiesta de Pijamas 3.0 [Parte II]

CAPÍTULO FINAL.

—¡Vamos, vamos, vamos! —Erin nos ordenó, entre susurros.

Las tres agarramos las pistolas de agua de donde las habíamos dejado anteriormete y salimos al jardín, donde habíamos visto a Eric, muy acaramelado con Vanessa, justo en la parte trasera de la tienda de campaña, donde había un banco de piedra.

—Esto me parece un poco cruel. —murmuré. 

—¿Cruel? —Nelly bufó. —Solo vamos a mojarles, no es para tanto.

—Me refiero a lo de arruinarles el momento romántico.

Desde luego, a mi me jodería que me arruinaran un momento tierno con Ian.

—Pues por eso mismo vamos a hacerlo. —Erin se encogió de hombros con una sonrisa. —¡A la carga! —gritó y después de eso, las tres salimos corriendo al jardín, con pistolas de agua en mano y empezamos a echarles agua a todos los que nos cruzamos por el camino. 

Erin atacó a James, entre risas, hasta que consiguió que saltara a la piscina.

Nelly y yo acabamos yendo a por Liam y Chase.

—¡AAAAAHHHHH! —gritó Liam, levantándose de la hamaca, para intentar esconderse, justo detrás de esta. —¡¿Pero, qué hemos hecho?!

—No es nada personal. —contestó Nelly, encogiéndose de hombros, pero sin dejar de echar agua.

—Gracias, mi vida, yo también te quiero. —Chase se burló, escondido como Liam, en la hamaca de al lado.

Erin volvió a aparecer a nuestro lado, con la pistola recién recargada de agua.

—¿Estamos listas? 

—Oh, por favor. —Nelly hizo un gesto de girar la pistola y sopló en la parte por la que salía el agua. —Nací lista.

Erin y yo nos reímos y Chase y Liam también lo hicieron.

A hurtadillas, fuimos de forma silenciosa a la parte trasera de la tienda.

—Uno... —susurró Erin. —Dos... ¡TRES! —cuando gritó el último número, dejamos de escondernos y aparecimos echando agua a las tres personas escondidas allí detrás.

Eric comenzó a taparse la cara con sus antebrazos y Vanessa gritó, huyendo del lugar.

Por su parte Bellarie, se quiso esconder debajo del banco.

—Supongo que tengo que daros las gracias por refrescarnos. —Eric dijo.

—Pero no por espantarte a la novia. —Erin sonrió.

—Tú solo intenta no espantar al tuyo, hermana.

—No creo que pueda hacer eso, ni aunque quisiera. —mencione yo, mirando a Erin y ella se sonrojó.

—Estoy de acuerdo. —Nelly dijo también y ambas chocamos la mano.

—¿Han dejado de echar agua? —preguntó Bellarie, desde debajo del banco.

—Estás a salvo. —respondió Eric, haciendo que el chico saliera de ahí.

—Voy a buscar a Vanessa.

—No, tranquilo, ya voy yo. —Eric se levanto del banco. —¡Vane! —la llamó. —¡Puedo dejarte ropa si quieres! 

—Supongo que misión cumplida. —Erin se rió de forma maligna y extendió sus dos manos, haciendo que Nelly y yo le chocáramos a la vez.