Imaginas- One Shots SELECCIÓN MEXICANA.®

75.- Brian Rodríguez

Seguimos con la "Brian's era"
Será una mini novela ¡disfruten!

Por fin llegué a las instalaciones del club America, dos meses sin poder hacer nada de ejercicio, nada de práctica de fútbol, ya que me lesionaron en un partido, pero por fin me habían dejado regresar.

-¡Ya llegue perras!.- dije entrando a los vestidores.

Todas se sorprendieron cuando me vieron, comenzaron a gritar de emoción, más Nikki y Sabrina.

-Por fin.- dijo Sabrina abrazándome.

-Ya extrañaba estar aquí.- dije sentimental.- Era horrible solamente ver los partidos por televisión.

-Pero ya estás de regreso.- dijo Nikki.- ¿Ya puedes jugar?

-Se supone, pero que vaya lento, si sigo igual, ya es operación.- respondí.-¿Que hay de nuevas?

-Llegaste en los mejores días.- dijo Sabrina.- Mañana es la foto de todo el club.

-No entiendo.- dije extrañada.

-Si, nos van a tomar foto a todos, al equipo de masculino y femenino, entrenadores, directores.- respondió Nikki.

-Entiendo.- respondí sentándome en una de las bancas.- ¿Listas para que les vuelva a dar una chinga?

Ellas rieron.

-Ya va a empezar la temporada, eres la pieza que le falta al rompecabezas.- dijo Sabrina.

Ella era de mis mejores amigas, la adoraba.

Sabía que yo era buenísima en el fútbol, me entregaba en cuerpo y alma, tanto que siempre me lastimaba, pero seguía, hasta que dos meses atrás, me pusieron un alto.

(...)

-Hace rato diciendo que nos ibas a dar una chinga.- dijo Nikki.

Salíamos del entrenamiento, la chinga me la dieron a mi, venía muerta, dos meses sin nada de actividad física, me habían dejado mal.

-Dame unos días.- dije soltando suspiros y limpiándome el sudor.

Caminábamos hacia el comedor.

Saludé a Layún y Henry, que eran con los que más me llevaba, me habían preguntado sobre mi lesión, eran como los papás del equipo.

Tomé gatorade, suero y todo el líquido hidratante posible.

Después de dejarlos en una mesa, fui y tomé mi almuerzo, compartíamos comedor el equipo de hombres y mujeres.

-Norita ¡hasta que regresaste!.- dijo Jonathan Dos santos a mi lado, el me extendió sus brazos a lo cual yo correspondí.

-Hola Jona.- dije emocionada.- ¿Me extrañaste?

-Claro, después quien nos iba a dejar sin alitas de pollo.- dijo riendo, yo era fan de las alitas de pollo y siempre que ponían en el comedor... eran mi perdición.- ¿Como sigues?

-Mejor, espero estar lista para la temporada.- respondí.

-Queremos ver esa máquina jugando.- asentí.

Después de saludar a algunos, me serví mi almuerzo y fui a sentarme.

Siempre se sentaba Alejandro Zendejas con nosotras, quería estar el poco tiempo que tenía libre con Sabrina.

-Mañana si nos van a dejar peinarnos como queramos, cabello suelto y así.- dijo Sabrina, yo asentí.

-Alejandro, no vayas a salir junto con Sabrina para que la podamos recortar.- dije advirtiéndole.