Capitulo 30

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—Relajate. Respira profundo, respira profundo...— Chen Miao hizo un gesto alentador: —Bien. Ahora ya has olvidado todo lo que acabas de ver. Tu cerebro está vacío; el mundo sólo tiene cielos de un azul puro, nubes blancas, cantos de pájaros y fragancia de flores...

—No, todavía no puedo hacerlo.— Yang Xiaodao se quejó en voz alta con el rostro lleno de indignación: —¡Cómo podría hacer esto y aquello a plena luz del día, y también aquello y aquello!

Chen Miao dijo con simpatía:—Mhm, el mundo de los adultos es muy sucio. A decir verdad, la última vez yo también lo vi. Después, hice construcción psicológica durante mucho, mucho tiempo...

En el gran sofá blanco de la sala de estar, Shen Zhuo y Bai Sheng se sentaron en cada extremo, separados por una distancia. Los dos tenían los brazos cruzados y una mano presionada contra su frente, sin hablar. Sus movimientos estaban en una rara sincronización, aunque sus pensamientos eran completamente diferentes.

—Ni siquiera había calentado el pequeño cisne que atrapé, y se fue volando así...— Bai Sheng suspiró, murmurando.

Shen Zhuo bajó las manos y le preguntó inexpresivamente a Chen Miao: —¿Por qué no me llamaste primero?

El líder del equipo Chen, que durante mucho tiempo había ido a todas las tiendas de té con leche cercanas a la oficina de supervició n, tenía una conciencia extremadamente culpable. Pensó para sí mismo:  Obviamente era porque se abrió una nueva tienda de té con leche en la intersección que estaba a solo cinco minutos a pie de la casa del hermaano Bai. Cuando ocurrió el incidente, él estaba parado frente al mostrador, a punto de pedir una taza de durazno fresco con espuma de queso. Aunque, afortunadamente, tenía una excusa que no era del todo irrazonable, por lo que tosió levemente, evitando los problemas mayores y enfocándose en los menores:—Uh... mayor, te llamé una vez y no respondiste...

Shen Zhuo se tocó el bolsillo del pantalón; estaba vacío.

Pensando en retrospectiva, su teléfono estaba en el zapatero de la entrada. Cuando entró, casualmente lo puso allí con su chaqueta.

—Está realmente relajado cuando está conmigo ahora, ¿verdad, supervisor?— Bai Sheng se acercó discretamente, susurrando por la comisura de su boca.

Shen Zhuo se sentó con indiferencia un poco más lejos y le preguntó a Chen Miao: —¿Qué pasó exactamente?

—Oh, entonces es así.— Chen Miao se tapó parcialmente los oídos, sin atreverse a escuchar las obscenidades de su  hermanoBai. Sacó su teléfono, lo abrió y dijo: —Fue el director Wang quien de repente me llamó y me dijo que había un vídeo que era tendencia en Weibo. Se trata de un paciente sospechoso de tener una enfermedad mental y un comportamiento agresivo que apareció en la estación de tren de alta velocidad de Shenhai. Quería que viéramos si tenía alguna relación con sus habilidades.

Mientras hablaba, abrió el video y se lo entregó: —Ya hice que algunos miembros del personal de vigilancia lo revisaran, pero hay bastantes puntos de sospecha, por favor eche un vistazo.

El vídeo ya había sido bloqueado en su mayor parte; el que Chen Miao había considerado relativamente completo. Los primeros segundos fueron de una multitud animada y una discusión ruidosa, como si estuvieran parados observando algún incidente inusual. Fue seguido por una pantalla negra durante unos segundos. Cuando la pantalla se iluminó de nuevo, el fotógrafo ya se había colocado al frente de la multitud. En la pantalla aparecía una esquina de la puerta del andén de la estación de tren de alta velocidad.

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