HUITIAN

Capitulo 64

El uniforme de combate negro estaba empapado de sangre, era cálido, pegajoso y húmedo. Desde una distancia tan cercana, se podía oler claramente el fuerte olor a sangre y óxido.

Shen Zhuo apretó los dientes, respiró levemente y miró fijamente los ojos negros brillantes y sonrientes que tenía al alcance de la mano.

Obviamente era una escena no relacionada, pero en esos pocos segundos, otra noche similar pareció aparecer ante sus ojos.

El mundo fuera de la ventana estaba a punto de ser tormentoso. En la cama del hospital, los ojos de Bai Sheng estaban fuertemente cerrados debido al dolor extremo y los músculos de todo su cuerpo tenían espasmos. Sus cinco dedos cubiertos de sudor frío apretaron con fuerza la mano de Shen Zhuo como si estuviera agarrando la última gota que le salvó la vida cuando estaba a punto de morir.

Pero eso no funcionó.

Sólo podía permanecer junto a la cama del hospital y observar cómo los números en el monitor de vida empeoraban rápidamente. Era un sentimiento extremadamente real que esta persona llamada Bai Sheng, que de repente irrumpió en su vida y dejó una gran marca, se fue sin previo aviso y pasó rápidamente cada minuto y cada segundo.

La espera paciente y el largo sufrimiento de esa noche fueron evocados nuevamente por el olor extremadamente real, cálido y espeso a sangre y óxido frente a mí. Incluso la sensación de la palma agarrada por la desesperación era exactamente la misma.

—Está bien, está bien, solo te estoy tomando el pelo. ¿Estás realmente enojado?—, Bai Sheng sintió profundamente que algo andaba mal con Shen Zhuo e inmediatamente suavizó su cuerpo para persuadirlo:—Está bien, ya no te sientas mal. ¿Por qué no me sacas1000 CC cuando salga? Yo...

Shen Zhuo de repente se separó y lo golpeó sin piedad, ¡bang!

Hubo un fuerte golpe y Bai Sheng recibió un golpe en un costado de la cabeza, salpicando algunos rastros de sangre en el lugar.

Yang Xiaodao estaba simplemente aturdido, su primera reacción fue frotarse los ojos, sintió como si estuviera viendo a un ser humano débil abofetear a leones con todas sus fuerzas.

Todo el cuerpo de Bai Sheng se fortaleció en un instante y los músculos de su espalda se tensaron como reflejo condicionado, como un león loco que estaba a punto de saltar sobre su presa. Pero entonces, Shen Zhuo lo empujó y se puso de pie, con el rostro helado y sin decir una palabra. 

Como si le hubieran vertido agua fría en la cabeza, Bai Sheng se despertó repentinamente e inmediatamente se apresuró a abrazarlo  a la fuerza por detrás:—Lo siento, lo siento, me equivoqué. No quise asustarte. ¿Se obediente, obediente? Sé que está mal. ¿No está bien?

Shen Zhuo dijo con severidad:—¡Suéltame!

—No tengas miedo, no tengas miedo, no te asustaré con este tipo de cosas la próxima vez, ¿de acuerdo? No tengas miedo.—Bai Sheng presionó con fuerza contra la fría oreja de Shen Zhuo y besó sus sienes empapadas de sudor frío una y otra vez:—Es demasiado peligroso aquí. ¿Cómo puedes salir solo? ¿Qué pasa si vuelves a encontrarte con una emboscada? ¡Yang Xiaodao!

Yang Xiaodao se apresuró a avanzar y Bai Sheng le guiñó un ojo:—¡Envíe al supervisor Shen de regreso a tierra, regresa rápido, apúrate!

Shen Zhuo se separó de Bai Sheng por un momento y salió con el rostro tan pesado como el agua. Yang Xiaodao rápidamente tomó su arma y lo siguió. Detrás de él, Bai Sheng lo persiguió en voz alta:—¡No se preocupe, supervisor Shen, esta vez tendremos cuidado! ¡Definitivamente no correremos ningún riesgo! ¡Nos comunicaremos con usted en tierra lo antes posible después de completar la misión!