Twisted Strawberry || TaeGyu

3

Cómo toda reunión, fiesta, celebración, o como se le quiera llamar, el ambiente más... Interesante, empieza a eso de las dos de la mañana, cuando la mayoría tenía alcohol en el cuerpo.

La familia no tardó en adaptarse al lugar, a coquetear con los empleados, a disfrutar del momento.

—¿Ya está vacía? —preguntó BeomGyu tomando asiento a un lado del alfa que tenía etiquetado como su cliente de esa noche, el alfa dejó la botella vacía de cerveza en la mesa, asintiendo y mirando en silencio cómo el trabajador abría una nueva cerveza para él, entregándola con una sonrisa coqueta.

—Gracias —fue lo único que dijo, bebiendo, BeomGyu miró alrededor rápidamente, ubicando lo que hacían los demás.

Había música a todo volumen, uno que otro besándose en los sillones, algunos familiares y empleados no estaban en esa zona.

—¿Cómo te llamas? —preguntó el alfa, desprendiendo un aroma a canela, era un aroma dominante e imponente, BeomGyu se atrevió a voltear a verlo, subiendo sus piernas desnudas al regazo ajeno.

Lo normal, era que el alfa mínimo dejara una mano en sus piernas, pero no lo hizo, sólo siguió con su cerveza, observándolo.

—Puedo llamarme como quieras, lindo, mi nombre no es importante —negó con una risa. Jamás le daría su nombre a un cliente.

—Si pregunto, es porque lo es.

—¿Qué tal si me dices tú el tuyo? —preguntó, esquivando las palabras ajenas, TaeHyun arqueó una ceja, mirando a su familia.

Su hermano tenía razón, a pesar de ser una celebración familiar, de un  momento a otro cada quien estaba centrado en lo suyo, y algunos ya estaban lo suficientemente ebrios como para recordar qué habían hecho o qué integrante de la familia había disfrutado de ciertos servicios.

Por eso, dejó una mano en los muslos del otro, notando que la piel estaba fría y pálida. Aún así, era suave.

—¿Para qué quieres tú mi nombre? —preguntó dándole otro trago a la cerveza, apretando la piel bajo su mano. El otro sonrió apoyando su brazo en el hombro del alfa, acercándose más— Si tu nombre no es importante, tampoco lo es el mío.

—Uhm, ya veo —afirmó con la cabeza, se inclinó a la oreja ajena antes de susurrar, con un tono coqueto— ¿Entonces no te gustaría oírme gemir tu nombre? Pero que aburrido, señor Kang —se burló al final, notando que ese alfa en realidad estaba algo renuente a tener algo con él esa noche.

Y eso era excelente.

Tal vez no tendría dinero extra, pero no estaría en la obligación de acostarse con alguien, si duraba pegado a ese alfa en esa misma situación por tres horas, se iría a casa como los otros días, sin tener que pensar en que había tenido sexo con alguien desconocido.

Aunque, tuvo una sensación extraña en el estómago cuando el alfa sonrió.

Tal vez no estaba tan renuente...

—Me llamo Kang TaeHyun —se presentó inclinándose a él, rozando sus narices— Y tráeme otra cerveza, ojitos lindos —pidió dejándole la botella vacía en manos, BeomGyu se levantó para cumplir la orden.

Carajo, antes se veía renuente, ahora no... Pensó entregando la botella abierta. Se quedó de pié frente al alfa.

—¿En dónde quieres que me siente? —preguntó dejando sus manos en su cadera, en forma de jarra, TaeHyun solamente hizo un gesto con la mano, restándole importancia.

—En dónde gustes —contestó bebiendo de la botella y moviendo uno de sus pies al ritmo de la música.

El bailarín disimuló un suspiro.