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Choi SooBin, alfa, extorsionador, se mantenía activo en muchos negocios sucios y un gran inversionista en la creación de nuevas drogas. En lo que a él respecta, no era una monedita de oro.

Su gusto por el dinero, era el mismo gusto que tenía por las personas, por un omega en específico.

—Dame de tu cigarro —pidió uno de esos omegas, colocándose un saco de piel sobre su desnudez, quitando el cigarro de sus labios para calarlo él mismo, peinando su cabello con su mano libre, SooBin lo observó desde la cama en la que estaba, relamiendo sus labios.

Estaban en su propio club, en una de las habitaciones más grandes que había, las vip. Tenían más comodidades que las casuales.

—Entonces... Ese bailarín te hizo enojar —habló el omega botando el humo hacia arriba, cerrando un botón del saco, cubriendo por lo menos su entrepierna.

—Lo de siempre... Cometí el error de darle privilegios y ahora que lo necesito para más cosas, no quiere y es complicado...

—Tu mismo lo buscaste, además, ¿No tienes muchos trabajadores? No puede ser él sólo todo el tiempo —opinó arqueando una ceja, SooBin asintió con la cabeza lentamente.

—Claro que hay muchos trabajadores, pero últimamente vienen clientes que han visto los vídeos pornograficos, y el protagonista es él... También Susy, pero ella por dinero le abre las piernas hasta a un caballo...

—¿Ella no es la que tiene un hijo? —preguntó el omega ladeando la cabeza, su cabello era castaño, y lucía de una piel muy tersa y hermosa, tenía facciones suaves pero a la vez varoniles, así como labios carnosos a los que SooBin no les perdía el gusto.

—Mejor no hablemos de esto, ven acá, precioso —pidió palmeando a su lado, el omega se acercó, tomó asiento fumando aún, mirando la mano del alfa en su muslo desnudo.

—Tengo cosas que hacer, corazón, así que habla  —pidió el omega soplando el humo en su cara.

—Necesito que investigues a alguien por mi, bonito —pidió acariciando su muslo, apretando cuando llegaba más arriba— Se llama Kang TaeHyun.

—¿Qué te hizo?

—Sólo es un dolor de cabeza últimamente...

—Bien, lo investigaré, ahora me voy.

—Oh, vamos, YeonJun, ¿Te vas tan rápido?... Yo sé que te gusta estar conmigo —afirmó el alfa, el otro asintió lentamente.

—Que me guste estar contigo, no quiere decir que dejaré de lado mis pendientes —mencionó inclinándose para dejar un beso en sus comisuras, ladeando la cabeza, el alfa besó su mejilla, bajó por su barbilla hasta llegar a su cuello.

YeonJun y SooBin, ambos estaban metidos en los mismos negocios desde hace años, aunque en la actualidad YeonJun empezó a desentenderse de ciertas cosas que pasaban en el ámbito de la pornografía, centrándose más en las inversiones de drogas nuevas, así como ser colaborador en el tráfico de drogas exclusivas y nuevas al mercado. Y era irónico, pues siendo un omega, participó mucho en una venta masiva de omegas hace años atrás.

Ambos se conocían muy bien, demasiado, desde muy pequeños.

Eran familia después de todo.

—Dame dinero para comprar mis anticonceptivos, no toleraré que siempre te vengas dentro y sea yo el que tenga que pagarlos —señaló el omega tomándolo de la barbilla con una sonrisa, dejó el cigarillo en los labios del alfa que sólo rió, separándose para buscar su billetera en sus pantalones arrojados en la cama, sacó de ella unos cuantos billetes de alta denominación para dárselos al omega que los contó, asintiendo cuando decidió que era más que suficiente.

Twisted Strawberry || TaeGyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora