48

324 59 13
                                    

Maratón 3/3





BeomGyu soltó un suspiro, cambiando la posición de su brazo, dejándolo debajo de la almohada, a lo lejos escuchó voces, sonidos de alguien comentando algo.

Yo no tengo televisión. Pensó entre sueños, se siguió acomodando, escuchó los ruidos detenerse.

Tal vez era el vecino. Pensó volviendo a caer poco a poco en su sueño, sintió unas manos quitarle la manta que tenía para quitar la botella de su vientre, dió un salto en su lugar de inmediato, asustado, abrió los ojos, asustando al alfa en el proceso.

TaeHyun suspiró, dejando una mano en su pecho.

—Carajo, ¿Por qué despiertas así? —preguntó quitando la botella, revisando que ya no estaba caliente, se había ido la temperatura anterior.

BeomGyu suspiró, tomando asiento mientras pasaba una mano por su cara.

—No estoy acostumbrado a tener a alguien aquí, y pensé que estaba sólo —contestó mirando la manta azul, TaeHyun dejó la botella en la mesa de noche.

Podía escuchar la lluvia aún más fuerte, incluso algunos truenos y relámpagos.

—¿Cuánto dormí? —preguntó levantándose del sillón, dejando la manta a un lado, TaeHyun miró su teléfono.

—Una hora y media —contestó, en todo ese rato el alfa había estado viendo vídeos en su teléfono.

BeomGyu se estiró soltando un quejido, ya era de noche, la lluvia no iba a cesar en un buen rato, y ya era hora de la cena.

—¿Todavía te duele? —preguntó el alfa levantándose.

—Me duele menos... —murmuró, pasando sus manos por su cabello— ¿Quieres comer algo? —preguntó, TaeHyun alzó los hombros con algo de vergüenza.

Si tenía hambre, pero no consideraba correcto que el omega cocinara si tenía cólicos, aún así, no podían pedir a domicilio por la fuerte lluvia.

—Di que si y ya, baboso —habló el omega con una pequeña risa mirando la duda del alfa que asintió al final, BeomGyu caminó a su habitación— Iré a cambiarme —avisó mirando el peluche en su cama, estaba acostado boca arriba y en una esquina.

Ladeó la cabeza mientras se quitaba la ropa para colocarse una más hogareña.

Definitivamente él había guardado hace dos días el peluche en el armario por precaución, si TaeHyun aparecía en su casa para sexo, tener el peluche en su cama no era lo mejor, y ni loco lo dejaría en el suelo.

Pensó también en la manta azul, esa no estaba ahí antes, era obvio que el alfa había escarbado en el armario para buscarla y en el proceso, encontró el peluche.

Mordió su labio inferior, pensando las cosas.

¿Debería contarle todo? ¿O sólo una parte? ¿Omitía la muerte de Mark?

Tomó el peluche en sus manos, saliendo de la habitación con una camisa holgada, y bermudas, volvió con el alfa que lo observó con el peluche en manos.

—Abriste mi armario —señaló sentándose cerca de él, en el sillón, sus piernas rozándose, TaeHyun asintió.

—No encontraba con qué cubrirte y parecía que tenías frío... —explicó mirando el peluche. BeomGyu asintió.

—Está bien, no es algo malo...

—Ese peluche es muy lindo —halagó mirando al osito, BeomGyu se recostó del sillón.

—Es especial para mí... —admitió, mirando al peluche, decidido— Puedes tomarlo —le permitió con confianza, el alfa lo sujetó con ambas manos, mirando al peluche, la ropita azul que tenía siendo muy tierna.

Twisted Strawberry || TaeGyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora