Twisted Strawberry || TaeGyu

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1 semana después.

Había pasado una semana entera desde su cena con su supuesta futura esposa, su madre había hecho el drama del siglo con el encuentro con BeomGyu y además TaeHyun se había enterado del despido del omega.

Su primera reacción fue enojarse con su madre, pero para ahorrarse más peleas sólo calló y se dedicó a llamar al omega.

—Te transferiré un millón, ¿Eso es suficiente para el mes? —preguntó por teléfono, mirando la vista que había desde la oficina de sus padres, estaba en la mansión.

—¿Un millón? ¿Para qué transferirme?

—Bueno, supe lo de tu despido, y no me gustaría que con tantos problemas y tú proceso hormonal sigas buscando trabajo...

—TaeHyun, yo no-...

—¿Podrías... Aceptarlo? Por este mes, por favor... Estarás más tranquilo en casa y luego podrás volver a trabajar con más calma si eso deseas... Te transfiero suficiente para que no te preocupes, compra lo que quieras y si necesitas más puedes pedirlo —insistió, BeomGyu suspiró del otro lado.

—Con... Quinientos es suficiente...

—Te pasaré un millón quinientos...

—¡No, no, solamente quinientos! ¡Es demasiado un millón!

—Si, bonito, un millón quinientos para ti.

—¡TaeHyun, no me estás escuchando, sólo quinientos!

—¿Qué? ¡Ay no, no te escucho, la llamada se va a colgar! —dramatizó.

—Eres un baboso, estúpido, imbécil de-...

—Ups —fue lo único que dijo colgando la llamada con el omega para ir a la aplicación del banco y hacer la tranferencia.

Un millón quinientos, tal como había dicho.

Leyó sus mensajes, aún BeomGyu insultándolo, sonrió de medio lado.

Cómo lo amo.

—Explicame qué hace un abogado en la puerta —habló su mamá, entrando de sopetón a la oficina.

TaeHyun suspiró mirando a la mujer, caminando en tacones pero manteniendo la venda en la mordida de Príncipe, si había sangrado después de todo.

—Es mi abogado, déjalo pasar —explicó asomándose por el balcón, dando la señal al servicio de que dejaran pasar al hombre.

—¿Qué haces con un abogado? Su boda es en pocas semanas, no necesitas uno ahora...

—No me voy a casar, madre —negó cruzando los brazos, la mujer frunció el ceño, se acercó a él, empujando el hombro de su hijo que le mantuvo una mirada seria.

—¿Por qué eres tan incompetente? ¿¡Ah!? ¿¡Acaso no piensas en tu familia!?

—El abogado está aquí por eso mismo, porque pienso en mi familia —contestó mirando al servicio dejar al abogado en la oficina.

Su madre chasqueó la lengua, pidiéndole al servicio que llamara a su esposo, eso era algo que ambos debían oír.

TaeHyun saludó a su abogado, revisando su teléfono, habían mensajes de BeomGyu.

Sonrió disimuladamente, había pasado una semana y unos días desde su separación y estaba ansioso por ir a darle la noticia y retomar su vida como quería.