Twisted Strawberry || TaeGyu

23

Luego de saber los días libres que BeomGyu tenía del club, TaeHyun había ido todos esos días.

Una semana entera que había ido al club, sin falta, a la misma hora, a pedir los mismos servicios, y uno que otro día se aparecía en su hora de salida del restaurante para hablar con él y llevarlo a invitarle cosas.

En todo ese tiempo, TaeHyun no lo había tocado y no había habido otro encuentro que entrara en lo sexual.

Y eso, en lugar de relajarlo, lo ponía aún más tenso y nervioso.

¿Qué estaba esperando el alfa? ¿Qué planeaba? ¿Por qué no hacía nada? ¿Le estaba dando largas al asunto?

Esas preguntas lo acompañaron toda esa semana, aún más cuando parecían ya haber armado una rutina.

Esa era la segunda semana, esa noche le tocaba dar varios shows al público.

¿Si irá a venir? Preguntó su lobo mientras se preparaba para dar el segundo espectáculo de la noche.

Siempre viene, es un acosador. Le contestó formando una sonrisa falsa para salir a dar el espectáculo, un baile erótico en frente de un montón de personas que le gritaban, lo halagaban y lanzaban billetes hacia él.

Se concentró en la música para ignorar las palabras de morbo.

Esa noche había más gente de lo común en el club, tal vez porque era sábado.

—Que precioso eres —halagó un alfa dejando un billete en los shorts del omega que sonrió, tomándolo de la barbilla en una suave caricia.

—Gracias —agradeció levantándose para despedirse del público, dando por acabo su baile luego de unos minutos, dándole paso a otro bailarín por el cual aplaudieron de la misma forma, volviendo al mismo auge de antes.

Suspiró bajando del escenario, tomando una botella de agua.

—Bonito —llamó una voz desconocida, volteó mirando a un tipo fumando tabaco, apoyado de la pared.

BeomGyu solo le dió una mirada y siguió caminando, buscando salir de ahí sintiendo que el tipo lo perseguía.

Otro cliente intenso. Pensó volteando a ver al tipo que lo perseguía, cuando volteó para seguir caminando, chocó con un pecho fornido.

—¿Cuánto cobras la noche, lindura?  —preguntó tomándolo del brazo con fuerza, BeomGyu frunció el ceño.

—No hago esos servicios —negó agitándose para zafarse del agarre, en eso, sintió al tipo de antes acercándose en su espalda, recostando su entrepierna de él.

A partir de ahí, sintió que no podía respirar bien.

Se agitó con todas sus fuerzas, arrojando agua a la cara del alfa que tenía en frente, el que tenía de espaldas lo abrazó para inmovilizarlo, se agitó mirando como lo llevaban a uno de los pasillos en contra de su voluntad.

—¡Suéltame! —exigió mirando al segundo acercarse, subió una de sus piernas y le pateó el abdomen con todas sus fuerzas haciéndolo retroceder y perder un poco el aire.

—Así que eres agresivo... —rió el mismo acercándose para darle un puñetazo en la mejilla, luego otro en la nariz, BeomGyu se quejó, volviendo a subir la pierna para patearlo, pero al alfa lo tomó de los tobillos.

Ahora sí, estaba inmovilizado por completo.

La música se oía de fondo, los gritos de la gente emocionados por el bailarín, nadie sin saber lo que pasaba en ese pasillo.