128: Muerte por muerte

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-Hola madre – Saludo Andrew – Me da gusto verte ¿Así que aquí te escondías?

-¿Qué? ¿En serio me vas a matar? – le dijo en un tono sarcástico, ofensivo... aunque Andrew parecía sereno, como que esperaba esa respuesta...

-Es mejor terminar con esto...

-Antes, termino con tu amorcito – dijo Pansy y en un segundo aventó un hechizo hacia Hope, aventándola a metros lejos de ellos

-¡HOPE! – Gritó Hermione

Y Andrew se volvió hasta Pansy y emitió un bufido... Pansy comenzó a correr y él la siguió... y de repente, Draco, Jenne, Draco y Hermione no los vieron...

Porque lo dos eran como humo que aparecía y desaparecía en el sitio, y era porque su velocidad era impresionante... Andrew estaba luchando ya con Pansy y se alejaban de la zona...

-Ella y yo tenemos una cuenta pendiente – dijo Hermione volviéndose a Jenne – Te encargo a Hope

-¡Mamá! ¿A dónde vas? – Gimió Hope media atontada, el golpe había sido fuerte

-¡Hermione! – grito Draco, pero ella ya corría hacia los manchones oscuros, presintiendo que las cosas no saldrían así de bien

Andrew y Pansy se enviaban hechizos uno tras otro, y no eran hechizos buenos, eran malignos, obvio que ella tiraba a matar y Andrew esquivaba, indeciso sobre su deber y lo que tenía que hacer en ese momento.

-¡Vamos, atácame bien Andrew, no seas tan estúpido!

-¡Basta madre!

-¿Crees que no se que intentarás matarme? – Dijo ella con su risa sarcástica - ¡Pero se que no lo harías!

-¡No me provoques madre!

Y de repente Pansy se paró... y le miró desquiciada, con los ojos enloquecidos, el pelo desparpajado y lamiéndose los labios en señal del triunfo.

-Entonces... hazlo Andrew... mátame...

El chico la miró, acarició la daga... la daga con la que debía matarla, solo era cuestión de dar un paso y enterrársela... y todo pasaría... El chico sacó la daga que brillaba...

-¿Cómo? ¿No será con magia? ¿Me vas a enterrar eso en el corazón? JAJAJAJA... ¡Eres demasiado bueno e idiota como para intentar algo en mi contra! Sacaste la misma nobleza de tu padre... el cual hizo todo lo que yo quise, por imbécil...

-No metas a mi padre en esto...

-¡Tienes razón! Era un inútil perdedor ¡Todo lo tenia que hacer yo! Pero como era mi cómplice, tuvo que aplicarse... maldito imbécil y tu eres igual que el...

Andrew sostuvo firmemente la daga y la acomodó en su mano... pero Pansy atentaba a su cordura, se acercó a él a unos metros y sonrió irónicamente...

-Anda, mátame Andrew... mata a tu madre...

Andrew apretó los dientes y de repente tomó a su madre por el brazo y le puso la daga en el corazón... sus labios temblaban, sus dientes estaban apretados, sus ojos se enrojecían por las lágrimas y eso odiaba, su sensibilidad...

-Debería matarte madre... debería hacerlo...

-Hazlo, entiérralo profundo, que la sangre de tu madre te salpique y te condenes...

Andrew enterró la punta en su pecho y una gota de sangre salió, Pansy por un momento dudó, pero se mantuvo firme, firme en lo que era su hijo, total y absolutamente confiada... La gota de sangre empapó la punta de la daga... Y si, era verdad, Andrew no podía quitarle la vida a su madre... y fue que ella aprovechó, le tomó el brazo a Andrew y le giró la daga hacia él... enterrándolo en su pecho...

Solo quédate en silencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora