68: Felicidad compartida

12 2 0
                                    

Paso una semana así... Hermione no salió de San Mungo de inmediato, pues todos querían asegurarse de que estuviera perfectamente bien... aunque ella ya estaba fastidiada de las cuatro paredes y deseaba escabullirse...

Y finalmente la anulación de bodas llegó...

Draco estaba sentado mirándola... sus ojos no reflejaban ninguna emoción o pánico, Hermione se acercó lentamente y suspiró al ver el papel.

-¿Y ahora? – Pregunto errática

-Pues – se irguió de la silla – No se tu pero yo ya soy un hombre libre

Hermione alzo una ceja

-¿A si? – Murmuró

-Si... soy soltero de nuevo... ¿Qué te parece?

-¡Ah! – Emitió un graznido – Entonces señor soltero, le aviso a usted que tomaré mis cosas, a MI HIJA y hasta pronto – y se cruzó de brazos esperando al reacción

Draco clavó sus preciosos ojos grisáceos en ella e hizo un gesto de una risa torcida y de repente, la jalo por el brazo, acostándola en sus piernas mientras la miraba con intensidad...

-Nuestra hija – Sopesó

-Pues tu has dicho que...

-¡Oh! Que obediente... ¿Crees que baje al infierno para dejarte ir tan fácilmente? No señorita... no... Tu alma me pertenece... eres mía para siempre Hermione... juntos hasta más allá de la muerte... porque aunque ella nos separara, yo te seguiría... y se que tu me esperarías, eso lo puedo ver en tus ojos...

-Gracias...

-No podría vivir sin ti amor... después de ti no hay nada... sin ti no estoy completo y sin ti, no soy nada...

-Te amo Draco...

-Yo también – Y ambos comenzaron a besarse con mucha intensidad, hasta que el llanto de Hope Diademiah Malfoy-Granger, los hizo reaccionar...

-Umh...

-¡Ah! Tu hija... tiene hambre de nuevo – suspiró Draco

-¿Mi hija solamente? JA! Es tu turno de darle bibe...

-Dale pecho...

-No se llena... ¡Anda! – Y lo empujo bajándose de sus piernas – Se buen padre y dale bibe a tu hija...

Draco sonrió y se acercó a Hope, tomándola en brazos, la pequeña fijo sus ojos castaños en el y sonrió por un momento y luego siguió llorando... finalmente el biberón estaba listo y se lo comenzó a dar, mientras ella fijaba sus ojos en Draco... mientras alzaba una manita y le tocaba el rostro, como reconociéndolo.

-¡Hermy! – de repente entro Ginny y la abrazó

-¿Cómo estás?

-Mejor ¿Y tu?

-Creo que mi fobia por las arañas será permanente...

-Igual que Ron...

-¡Oh! Cierto – Sonrió Gin y se volvió a ver a la pequeña un momento - ¿Cómo está Hope?

-Perfecta...

-¿Y eso? – Señaló el papel de anulación - ¡Cielos!

-Si... ya soy una mujer libre... libre para buscarle un nuevo padre a mi hija en vista de que Draco no quiere casarse de nuevo...- dijo alto con una chispa malvada

El rubio se dio la vuelta mirándola con recelo mientras ella le daba una sopa de su propio chocolate... claro, ella luego soltó una risita media tonta y miro a Ginny en complicidad...

Solo quédate en silencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora