Solo quédate en silencio

118: Incomprensiblemente

Ignorada... Dolida, humillada... estúpida. Si... así se sentía Jenne... había dicho un comentario irónico a Dom sobre su regreso, pero éste le había ignorado completamente... ¿Qué le pasaba? ¿Por qué después de besuquearla, casi manosearla y decirle que era el hombre de sus sueños, ese escuincle idiota la hacía menos?

Los ojos le picaban y le daban ganas de llorar, pero se aguantaba, no le daría gusto a nadie verla así, pero era imposible aguantarse las ganas, porque los ojos enrojecidos la traicionaban... sin embargo, controló sus sentimientos.

Hermione notó esa actitud en Dominic y se atrasó con el...

-Dominic

-¿Qué pasa señora Malfoy?

-¿Qué te pasa?

-Nada – sonrió con tristeza

-¿Nada? Te conozco, se que eres serio y responsable, estudioso, pero también eres divertido y espontáneo, tienes una sonrisa maravillosa y alguna vez pensé en ti para novio de mi Destiny

James escuchó de casualidad aquella última frase y rabió

-¿Qué? ¿Con Tiny? ¡NO!

-Es muy amable señora Malfoy, pero Destiny Jane y yo, solo somos buenos amigos...

-Eso lo sé... pero... es que estás triste... y sé que tus penas no son por la preocupación por tu hermano... ¿Son penas de amor? ¡Conozco esa mirada en los hombres!

Dominic miró sin querer a una refunfuñada Jenne, que mascullaba entre dientes y se notaba que de buena gana, se hubiese transformado en ave y marchado de ahí.

-Oh... Ella – musito Hermione

-¿Qué?

-Es diferente a ti – suspiró – ¡Pero es mayor que tu y por decenas, ella crió a mi hija, así que no creo que te convenga una mujer que aparenta 17 años, que se ha detenido en el tiempo y se niega a avanzar! – Afirmó pero observó la gran tristeza en los ojos de aquel adolescente - pero aún así, mueres por ella... tengo que reconocer que no me cae bien...

-Ella no me desea – Respondió el chico abriendo más su corazón a Hermione que a sus propios padres – le molesto, le fastidio y aparte, no soy lo suficientemente poderoso para estar con ella... su poder no se compara al mío... no tengo nada nuevo que ofrecerle...

-¡Pero eres un muchacho maravilloso! Tienes un noble corazón, puro y sin manchas ¿Qué jovencita no te querría? Bueno, ella no es ninguna jovencita... es más grande que yo, por los años que no ha avanzado...

-Deberíamos liberarla – susurró Dominic – Está con nosotros, casi por obligación...

-Si... tienes razón... no debe seguir con nosotros... mejor que regrese a su castillo...

-Señora Malfoy

-¿Qué pasa?

-¿Dejará ser feliz a Hope?

Hermione se quedo en silencio... mirando al frente, observando el cabello castaño de Tiny que iba charlando con su padre, y a su lado James como fiero guardián, cuidándose de las manos de su madre.

-Te refieres... con...

-Andrew es inocente señora Malfoy... él no tiene los sentimientos de su madre, es diferente, es bueno... y lo siento cerca, eso quiere decir que en cualquier momento, nos encontraremos... por favor... si quiere que su hija sea feliz... déjela estar con él...

Hermy no fue capaz de responder... se le hizo un nudo en la garganta mientras avanzaban, bajando por la colina pretenciosa, el cielo estaba despejado, pero su mente nublada.