Inazuma Eleven: Recuerdos....

109. Mina Kanade, La Princesa.

Íbamos a empezar el primer tiempo.

Narra Kanade

¿Que me quieren decir?

Yuuno me ha dicho que me iría a explicar algo de mi pasado, y yo no recuerdo nada, supongo que tal vez no entenderé nada.

Yuuno se ha ido por un momento dijo que tendría que irse a comprar faroles para nuestra casa afuera de el paraíso.

Narra Yuuno, por la ciudad de el Paraíso.

Estoy buscando mi casa....ya han pasado 30 años que no vuelvo y como podre recordar la dirección.

Hasta que encontre a alguien conocido, mi madre, no quería ser tan ruidosa ni nada así que le toque el hombro.

- ¿Si?. - Al parecer no tomó mucha atención y se fijaba en su bolso.

- ¿Hola? ¿Madre?. - Se dio vuelta y no había cambiado nada, tenía 139473937529 años, pero parecía de 38, su misma palidez y su cabello largo morado tomado.

- ¿Yuumie? ¿Eres tu?. - "Yuumie" era mi mote.

- ¡Si madre! ¡Soy yo!. - Le abraze.

- ¡Cuanto tiempo! ¿Dime, volverás y dejarás a la diablesa de tu hermanastra?. - Me Preguntó con una sonrisa de oreja a oreja, no es que a mi madre no le agrade Kanade pero como trató a la gente....

- ¡Claro que no! Vine para quedarme en el castillo de su próxima realeza. - Le hice una reverencia.

- No hay remedio contigo. - Suspiro. - Y bien, ¿Necesitas algo?.

- ¿Todavía tienes los vestidos de Kanade?. - Pregunté caminando para avanzar hacia mí ex casa.

- ¿Por que iría a botarlos?. - Sonrío de una manera pícara.

Los fui a buscar y tenía todos los vestidos posibles, pero elegí uno morado con encajes blancos y era muy delicado, de rápida le cogí unos tacones rosados.

Baje y me fui lo más rápido posible para poder explicarle el plan a Kazemaru, bueno que digamos primero decirle lo que era antes a Kanade...... Tengo miedo.

Lo empecé a pensar y la verdad al fin y al cabo no sabía si decírselo muy rápido, ese chico de hace un rato se fijo en ella y si el se fija...todos se van a fijar, es mejor decircelo y es mejor que se lo diga yo que otra persona.

Cuando llegue ella se abalanzó contra mi y me Sonrío.

- ¡Demoraste mucho! ¿Que traes en esa bolsa?. - Apuntó a la dicha.

- N-Nada....- Gotita en forma anime.

Me senté en la banquilla y sólo me tocaba esperar a que sea el tiempo de descanso para que me ayude Kazemaru.

En el tiempo de descanso.

Los dos nos llevamos a Kanade cerca del castillo.

- ¿Que querían?. - Dijo Amablemente.

Kazemaru me miró y yo me estremecí.

- Kanade, T-Tu eres....mi hermanastra....

- ¿¡Que!?. - Grito confundida.

- ¡Como oíste! ¡Soy tu hermanastra!. - Empecé a llorar.- Además eras la "princesa del milenio" pasado....- Así se le llamaba a ella.

- ¿Soy....la princesa tirana?. - Quedó en Shock.

- ¿Ella sabía quien era "esa" princesa?. - Susurro Kazemaru.

- Si, tiene muchos libros de historia en nuestra casa. - Explique. - Ahora trataremos de devolverte tu trono.