Narrado por Bastian:
"Tiré de su mano en la dirección que me parecía correcta incluso cuando sentía cierta resistencia de su parte. No la juzgaba, no era quien para hacerlo y aunque lo fuera sabia que siempre intentaría ponerme en su lugar.
Eso me resultaba más complicado aún, no podía leer sus pensamientos como antes. Ella había dejado de ser un libro abierto para mi.
Tal vez en el fondo de mi mente supiera aquello que no me animaba a admitir en voz alta. Estaba dispuesto a hacer cualquier cosa por la chica que tomaba mi mano como si yo fuera lo único a lo cual sería capaz de aferrarse en toda su vida. No importaba la cantidad de discusiones que hubieran entre nosotros, tampoco las diferencias o los defectos que teníamos en medio. Estaba más que dispuesto a pelear contra el mundo si ella continuaba a mi lado e incluso si ella decidía no hacerlo, siempre su seguridad sería mi prioridad y lo sabía desde el momento en el cual fui capaz de notar que mis ojos no mirarían a otra mujer como la veían a ella.
No importaba cuanto tuviera que luchar, o contra quien tuviera que hacerlo. Muchos me consideraban un diablo caminando por la vida dispuesto a llevar la destrucción por donde decidiera pasar, pero ella no me hacía sentir así. Ella me hacía sentir un diablo queriendo proteger al ángel más hermoso.
—¿Dónde vamos? —La oí preguntar pero en lugar de responder, solo entrelace nuestros dedos y les di un leve apretón—. Bastian.
—¿Confías en mi? —pregunté en respuesta.
No sabia porque necesitaba que ella me otorgara algo que yo mismo le había pedido que no hiciera pero contra toda suposición, necesitaba aquello más que respirar. Estaba dando todo de mi, peleaba con miedos e incertidumbres constantes pero anhelaba o mejor dicho, necesitaba, que ella confiara en mi.
¿Por qué no podía comprenderme a mi mismo? Sabia que debía detener aquello, porque no importaba que, estábamos hechos para caminar por rumbos separados. No necesitaba que alguien me lo dijera, era capaz de ver la realidad que nos rodeaba. Ella me quería demasiado y yo a ella, pero el querer aveces no incluye el poder.
Algunas veces debes apartarte de quien quieres para permitirle ser abrazado por el bienestar que tú no puedes otorgarle.
El único problema que veía, es que sólo estando con ella olvidaba quien era y recordaba quien quería ser. Solo a su lado me permitía continuar aferrado a las metas que siempre había deseado alcanzar. Era egoísta y lo sabía, pero llevaría aquello al límite y cuando tuviera que decidir esperaraba con fervor que todo me hubiera preparado para estar listo y hacer la decisión correcta.
—Confío en ti —aseguró por lo que no pude evitar sonreír—. Solo soy curiosa, quiero saber a donde vamos.
—Justo ahí delante —respondí dándole un último tirón a su mano que me permitió rodear su cintura con mi brazo y acercarla lo suficiente a mi como para poder plantar un beso en su frente—. Un momento a solas no nos viene mal.
La vi sonreír mientras soltaba mi mano y volteaba a verme. El suelo no era demasiado uniforme, por lo cual ella podía caer si no veía por donde iba pero eso no le impidió caminar hacia atrás mientras me miraba divertida.
—Pasar un momento privado contigo nunca es malo. Claro, siempre y cuando no comiences a comportarte como un cabrón al cual deseo golpear —dijo entre risas pequeñas que me causaban ternura—. Odio los impulsos que siento por golpearte.
—¿Sientes pena de golpear a un hombre tan jodidamente ardiente? —La vi arrugar su nariz como un pequeño gatito antes de negar con la cabeza.
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Oculto
FantasyTan curiosa e ingenua que el irse de casa para buscar sus origenes suena increíblemente sencillo. Inmersa en un viaje repleto de vueltas que parecen no acabar jamás, chicos que conoce en la carretera, padres preocupados, cualidades encontradas y pes...