Narrado por Jazzlyn:
Cuando salí de la celda de Zaira un cansancio mental que no tenía nombre se había apoderado de mi. No me había creído ni por un momento que esa mujer había perdido la cordura pero mientras la veía rodear sus piernas con ambos brazos mientras se mecía sobre su propio peso en el suelo, no tuve duda de que algo había afectado su poca salud mental.
Por no decir casi nula.
—¿Has tenido suerte? —Me apoyé en la puerta de la celda y observé a mi hermano sin pronunciar palabra, no era algo demasiado necesario con él—. Por tu cara, definitivamente se nota que no.
Entonces tenía suerte de que mi cara transmitiera lo suficiente.
—¿Tienes idea de que pudo haber afectado de esta manera su estabilidad? Es decir, estaba perfecta la última vez que la vi y de un día a otro ella no puede dejar de repetir números como una desquiciada. Tuvo que haber un detonante, algo que la haya puesto así. —Jaden se sentó en el suelo frente a mi y olvidando por completo el resto, imité su acción—. ¿Todo bien?
—Si, solo pensaba en una teoría... —Lo vi pellizcar la yema de su dedo con sus dientes antes de mirarme con una palpable precaución—. ¿Bastian sabía que Zaira estaba acá?
No sabía por donde quería ir pero Jaden siempre tenía un camino trazado.
—Claro que sí, él fue quien la encerró en primer lugar.
—¿No crees que le haya querido hacer una visita? —No respondí porque no había una contestación certera, Bastian tenía motivos de sobra para querer ver a esa mujer—. Sé que te suena descabellado pero...
—No—interrumpí—. No me suena así, incluso parece coherente. Es que, mira, Abdel y Zaira estaban aliados cuando todo se desmoronó. Zaira a su vez debe saber más de lo que es conveniente, y la única persona que puede desnivelar su salud mental, es Bastian.
—Y Bastian está con Abdel así que no quiero ni pensar en lo que puede meterse en su cabeza. —Asentí estando de acuerdo—. ¿Cómo puedes estartan tranquila cuando Bastian hace todo esto?
No me encontraba tranquila, pero no lo podía culpar. Una parte de mi quería exigirle que abriera los ojos y se dejara de juegos estúpidos pero la parte coherente, esa parte de mi que lo conocía, entendía perfectamente que la verdad no es verdad si no la descubres por ti mismo.
—Lo han engañado toda la vida y créeme, Bastian no está completamente aliado con Abdel. Lo conozco Jaden, y esta vez no podrán jugar con él. Está buscando la verdad, y cuando la encuentre, él dejará de ser un imparcial.
—¿Y si decide ir contra tus ideales?
Siempre estaba el riesgo de que Bastian no permaneciera de mi lado.
—No quiero pensar en que eso pueda pasar pero si lo hace, sé muy bien que antes de ser su pareja soy la elegida, y tengo que acabar con esto sin importar quien se ponga en mi camino. —La mano de Jaden sostuvo la mía y le dio un leve apretón, no tuve que preguntarme quien había ido a su mente cuando comenzamos a hablar de traiciones—. No quiero siquiera imaginar que él pueda elegir ese bando. Estoy planeando mi vida con él, y si elige algo así...
—No lo hará —aseguró interrumpiéndome—. Lo puse como una opción pero es algo descabellado de mi parte. Él te elige a ti sobre cualquier cosa, incluso me arriesgo a decir que dejó de ser un imparcial antes de irse de aquí y todavía él no lo ha visto.
—Es muy probable. —Me coloqué de pie y estiré mi mano para ayudarlo a hacer lo mismo—. Vamos, queda su madre, Araxiel y Lilian.
—Antes que lo olvide —dijo colocándose de pie—. Pedí una psicóloga para Zaira y Delya, por lo que sé la doctora vendrá esta misma tarde pero si no funciona es posible que debamos pedir una psiquiatra.
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Oculto
FantasyTan curiosa e ingenua que el irse de casa para buscar sus origenes suena increíblemente sencillo. Inmersa en un viaje repleto de vueltas que parecen no acabar jamás, chicos que conoce en la carretera, padres preocupados, cualidades encontradas y pes...