Capítulo XII

2.4K 170 11
                                    


El capítulo está dedicado a 

@MiSolNatsume  

@Haru_Fushimi  

@rukia1111  

@AylinSuarezM  

@Luzfnaf  

@EthelJaimes  

********************************************

Kuroko probó las dos salsas de la carne pensando en cuál de ellas era la mejor, no sabía mucho sobre cocina ya que no se había apuntado a las clases culinarias en la academia, pero podía decir sin duda alguna que la nueva salsa era mucho más sabrosa que la antigua, aunque esta última tampoco que quedaba atrás, complementaba maravillosamente la carne dándole un sabor mucho más delicioso.

Dirigió una mirada a su esposo que estaba al lado suyo comiendo de su plato y se fijó en que Kagami a diferencia de la mayoría de personas- que habían probado las dos salsas- sólo sazonaba su carne con la salsa tradicional, al parecer realmente le gustaba. Decidió que aprendería a hacerla para poder preparársela él mismo.

Estaban sumergidos en un silencio muy incómodo para él, no sabía cómo empezar una conversación ni qué temas resultarían interesantes para su esposo así que estaba pensando mucho sobré qué poder hacer para acabar con la falta de comunicación.

Decidió después de un tiempo mostrar interés por su trabajo, después de todo, era seguro que a su esposo le gustara hablar de ése tema, ya que en varias ocasiones su madre le había dicho que era el mejor en lo que hacía.

—¿Vuestro viaje a la villa ha dado los resultados esperados? — preguntó cuidadosamente, manteniendo la mirada fija en su plato de comida.

Kagami le observó en silencio un tiempo antes de contestar a su pregunta.

—He podido cumplir mi objetivo.

—¿Cuál era?

—Cobrar unos impuestos— respondió de forma inmediata.

La respuesta había sido corta, mostrando la falta de interés en contestar y eso desanimó a Kuroko, quien decidió callarse, pensando que le molestaba hablar a la hora de la comida.

Kagami al notar el poco interés con el que había respondido se dio cuenta de que su pequeño esposo intentaba crear un mejor ambiente, así que dejó de comer y se dedicó a mirarle.

—¿Cómo has pasado el día? — preguntó obteniendo la atención del doncel.

—Ha sido entretenido— respondió con una sonrisa—. He podido aprender cómo llevar un castillo, aunque todavía no sepa todo lo que tenga que saber.

—Con el tiempo lo conseguirás, estoy seguro.

Después de eso se mantuvieron de nuevo en silencio, comiendo cada uno de su plato, hasta que Kagami dejó de lado lo cubiertos y, cogiendo la copa de vino, le miró de nuevo.

—Dentro de poco será la temporada de Oro— informó tras beber de la copa—. ¿Querrás ir a los bailes?

—Claro— respondió inmediatamente—, prometí encontrarme con mi madre y hermana en ellos.

—Entonces asistiremos a todos aquellos que podamos, siempre y cuando mi trabajo no nos lo impida.

Kuroko se sorprendió por sus palabras al mismo tiempo que la dicha le llenaba, había estado buscando el modo de sacar el tema para poder pedirle que asistieran a los bailes de la Temporada de Oro y poder encontrarse con su familia, incluso si no asistían a todos sino a algunos, mientras pudiera verles hubiera sido suficiente, que él decidiera, sin que se lo hubiera pedido, que asistirían le hacía enormemente feliz.

Tú que decías confiar en mí (Saga Gaia's Tales II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora