;me encanta;

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Se pasó una mano por la cara. ¿Por qué se había despertado? La alarma ni había sonado. Suspiró cansado y abrió ambos ojos, encontrándose con los números del reloj despertador que estaba sobre la mesita de noche. Las cinco y media de la mañana. Bufó de mal humor, cerró los párpados y se acurrucó mejor contra el cuerpo que había a su lado, dispuesto a seguir durmiendo, pero volvió a abrir los ojos, sobresaltado. Con cuidado, giró un poco el cuello, y vio a Cristian dormido al lado suyo, y lo mejor era que tenía uno de sus brazos por la cintura del rubio, así como si lo estuviera abrazando.

Sean se quedó paralizado un momento, observando el rostro dormido del castaño. El pelo le caía desordenado sobre la frente, y sin las gafas parecía un niño pequeño.

CREO QUE ME VA A DAR UN INFARTO. EXHALA. INHALA.

Tuvo la tentación de apartarle un mechón de pelo que le caía sobre la frente, pero decidió no hacerlo por si se despertaba. Si Cristian se llegaba a despertar seguro que le dejaba de abrazar y quién sabía si hasta le pegaría una patada. Además de que así estaba para una foto.

Con mucho cuidado de no despertar al chico a su lado, salió de la cama y se fue de la habitación de puntillas, sintiendo el frío suelo en sus pies descalzos, haciéndolo estremecer. Se metió en su cuarto, el cual estaba vacío, y recordó que Mark había dormido con sus padres. Se fue hacia el escritorio y cogió su móvil. Volvió a la habitación con el mismo cuidado de antes, y se metió de nuevo en la cama. Se tapó con la colcha y cogió el brazo de Cristian, poniéndolo sobre su cintura, puso la cámara de su Iphone y sacó un par de fotos desde distintos ángulos, hasta ponía distintas muecas en la cara, mientras que Cristian solo se limitaba a dormir.

Cuando decidió que ya eran suficientes, escogió algunas de las fotos y se las envió a su prima, que inmediatamente le contestó.

Leslie: espero que me hayas despertado por una buena razón

Leslie: las fotos no cargan

Sean: espera, tranquila

Leslie: OMG MG SOSSLKJWLJDWIODJIOWDJ SOSOSOSOSOSOSOSOSOSO

leslie: HABÉIS FOLLADO? DIME QUE SÍ OMG OS SHIPPEO TANTO. SE LO DIRÉ A VANNESA EN CUANTO PUEDA

Sean: no, no hemos follado :((((

Sean: pero es tan tierno durmiendo aaaaawww

Leslie: me das diabetes. iugh

Leslie: pero no es tierno despierto?

Sean: la mayoría del tiempo...no

Leslie: HAHAHAHAHAHAHA

Leslie: buena suerte ;*

Sean soltó el móvil en la mesita de noche y se dispuso a dormir hasta que sonara la alarma para ir al instituto, así que cerró los ojos y se pegó más a Cristian (si es que eso era posible).

*
*
*

Sintió cómo alguien se movía a su lado, así que poco a poco, fue abriendo sus ojos verdes, encontrándose con la cabellera rubia de Sean. El chico le daba la espalda y tenía el cabello rubio completamente revuelto. Tuvo ganas de peinárselo con la mano, pero se contuvo. Dejó de fijarse en su pelo y sus ojos descendieron hasta su cintura, por donde le estaba abrazando.  ¡Encima lo estaba abrazando!

Me cago en la leche.

Durante lo que llevaban de curso había intentado por todos los medios ignorar al rubio y luego este acababa durmiendo en su cama y encima él se dedicaba a abrazarlo inconscientemente.

Maldito subconsciente que hace lo que quiere.

Quitó su brazo del cuerpo de Sean y se sentó en la cama, pasándose el dorso de la mano por los ojos y luego hizo un intento de poner el pelo hacia arriba. Suspiró cansado y se puso las gafas. Miró hacia la ventana. Esta aún estaba mojada por la lluvia, y se podían ver nubes negras en el cielo, pero no llovía.

Vio en el despertador que quedaba bastante poco para que sonara la alarma, y luego fijó sus ojos en el rubio, que seguía dormido abrazando a la almohada, con el pelo revuelto en diferentes direcciones. Y de nuevo tuvo ganas de peinarle, aunque tampoco lo hizo.

En realidad, se duerme mucho más calentito así.

Sacudió la cabeza cuando pensó aquello, en un intento de que aquellos pensamientos desaparecieran, pero para qué mentir, le había gustado dormir con Sean. Lo normal en él en la noche anterior, hubiera sido haberse negado a que se quedara a dormir con él, pero el miedo a la tormenta era más fuerte que su orgullo, y de todas formas no se arrepentía del todo. Total, muchos amigos dormían juntos en la misma cama y no pasaba nada. Había habido veces en las que había dormido con Thomas y Elliot y tan normal, aunque bueno, a Sean le conocía menos, mucho menos. También estaba el hecho de que Sean era gay y todo el mundo lo sabía, pero luego también estaba el hecho de que a Cristian le importaba una mierda lo que pensara la gente.

-Si quieres me haces una foto para que te dure más. Siento como que me desgasto.-murmuró sonriente Sean, que lo miraba desde abajo.

Cristian se sonrojó al oír aquello y ahí fue donde se dio cuenta de que había estado observándolo todo el rato.

-Oh, deja de decir tonterías. Eres tan imbécil.-se quejó tumbándose de nuevo, dándole la espalda.

Antes de que Sean dijera algo, la puerta de la habitación se abrió. Era la madre de Sean, que miraba a su hijo con desaprobación, mientras que este solo le dedicó una sonrisa sarcástica. Cristian se giró al escuchar la puerta abrirse y se apoyó sobre sus codos para ver mejor.

-Han llamado del instituto. Por la tormenta, una rama de un árbol se partió y ha roto una de las ventanas de una clase, así que hoy no tenéis que ir.-informó mirando fijamente a su hijo.

Sean sonrió ampliamente mientras que Cristian solo pensaba que así podría dormir más.

Mark apareció en la puerta junto a su madre, ya iba vestido y peinado, y miraba a los dos chicos con recelo.

-¡No es justo que ellos no vayan!-se quejó dándole una patada al suelo.

Su hermano mayor lo ignoró olímpicamente y abrazó a Cristian, aprovechó la situación porque el castaño estaba desprevenido y su madre delante, así que la podía fastidiar.

-¡Ay, no me toques!-se alejó Cristian de él, pero lo hizo tanto y tan rápido, que cayó de la cama con las mantas enrolladas en sus piernas, haciendo que los dos rubios comenzaran a reír. La mujer se cruzó de brazos e hizo que Mark se fuera, cerró la puerta y volvieron a estar solos.

Sean se asomó por el borde de la cama y vio que Cristian había caído de cara al suelo, con las mantas sobre él. Rio de nuevo al verlo y Cristian levantó la cabeza para mirarlo de mala gana. Le tendió una de las manos, pero el castaño la rechazó y quitándose todas las mantas de encima, se levantó y se fue de la habitación, dejándole solo.

La alarma comenzó a sonar, pero Sean no la apagó inmediatamente. Estaba pensando con una estúpida sonrisa en la cara.

Es tan torpe pero tan orgulloso. Me encanta.

me aburro

qué signo sois?

sois de algún fandom?

de qué país sois?

me aburro x2

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