;ironía y sarcasmo;

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Se sentó en uno de los viejos sofás del garaje de Alec y comenzó a afinar la guitarra. Louis se sentó a su lado, girando las baquetas de la batería entre sus dedos.

-¿Qué haces con eso? Son de Alec.-señaló con la cabeza las baquetas.

-Solo se cree guay.-espetó el pelirrojo quitándoselas, sentándose a su lado.

-¿Sigue sin hablarte?-preguntó Louis mirando sus redes sociales.

-Ayer me pidió que le pasara la sal.

-¿Qué ha pasado?-preguntó Alec interesado en el tema.-¡Yo nunca me entero de nada!

Sean suspiró cansado y dejó la guitarra sobre la mesa baja que estaba llena de envoltorios de golosinas y barritas de chocolate.

-Pues que ayer me estaba bañando y de la nada vino al baño Cristian y lo vi desnudo y empalmado.

-WOOOOOOOOOOOOW.-abrió la boca ampliamente-. ¿Y por eso tanto drama?

-No le habla desde el sábado por la mañana.-informó Louis levantando la vista de su móvil.

-¿Y la tiene grande?

-No está mal.-se encogió de hombros, quitándole importancia, pero luego puso los ojos como platos-. ¿Y a ti qué más te da? Oye, que Cristian es mío.

Ambos amigos se rieron de los celos del rubio, que los miraba mal.

-Tranquilo, que a mí me van las tetas.

-Hay tíos que tienen más tetas que algunas chicas. Mi hermana es un ejemplo de ello.-se rio Louis.

A Sean y a Alec les entró la risa sin razón alguna y cuando se tranquilizaron, se miraron entre ellos y suspiraron con una sonrisa tonta en los labios. Louis volvió a mirar su móvil.

-Logan dice que no viene, por bla bla bla problemas con el pelo.-leyó desinteresado.-Entonces... ¿Hoy no ensayamos?

-Claro que sí, Logan es la voz principal pero podemos ensayar perfectamente.

-Sean, NO CONSIGO ENTENDERTE CON TANTA IRONÍA.-gritó Alec, provocando que Sean riera-. ¿Jugamos a la Play?

*
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Pegó un par de veces en la puerta de la casa de Cristian y metió las manos en los bolsillos de su chaqueta. Había anochecido hacía ya un rato, y al ver que Laura llevaba puesto un delantal, supo que ya estaban preparando la cena.

-Hola, Sean.-le sonrió, dejándole pasar.

El rubio dejó la chaqueta en el perchero y le sonrió a la mujer.

-¿La cena está ya?

La mujer, que ya iba a volver a la cocina, se giró para mirarle.

-No, ¿tienes hambre? Me iba a poner a hacerla ahora.

-Oh, no te preocupes, Cristian y yo teníamos planeado prepararla nosotros. Al muy tonto se le habrá olvidado decíroslo.-sonrió tontamente.

Laura enseñó una gran sonrisa.

-Pues todo vuestro.-se quitó el delantal y se lo tendió. Si tenía una ocasión de no cocinar, no la iba a desaprovechar.

Sean lo cogió y tras dedicarle una última sonrisa a la mujer, se fue a la planta de arriba. Por el camino desde la casa de Alec hasta la de Cristian había estado pensando en que no podía seguir en esa situación con él. Tenían que hablar sobre lo que había pasado y olvidarlo, sobre todo porque volvían a casa dentro de tres días y no se los podía pasar con Cristian evitándolo a toda costa. O simplemente estar los dos en una habitación hablando, no tenía que ser de aquel tema. Con que volvieran a hablar a Sean le bastaba. Además, le resultaba que Cristian estaba actuando de forma exagerada. Como si él nunca hubiera visto una polla. Aunque a lo mejor Cristian de verdad era un chico muy tímido...

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