¿Fue parte del destino?

Un primer cumpleaños juntos

24 de septiembre, 3 pm

Tal como lo prometió, estaba yendo a visitar la tumba de su madre biológica junto a su padre que acababa de llegar de su vuelo por la mañana. Decidieron ir después de almorzar con la esperanza de que la lluvia se detuviera, a pesar de que ya habían visto que el pronóstico del clima anunciaba días de lluvias.

Ella se encargó de llevar el ramo de margaritas que habían comprado antes de llegar al cementerio. Después de cinco años se enteró de que las margaritas eran sus flores favoritas, en vez de las rosas. Aunque prefería el aroma de las últimas, aunque apenas lo llevaba puesto. Un dato que no era relevante, pero quedaría grabado en su memoria.

Dejó el ramo cuidadosamente sobre la lápida sin apartar la mirada. Le pareció raro que la piedra de granito estuviera tan reluciente mientras estaba al aire libre. A lo mejor su padre se había encargado antes de llegar a la ciudad, o incluso Mark, así que no le pareció necesario comentarlo. Qué podía saber ella si siempre había evitado el tema en todos esos años. Le mostró sus respetos a la mujer que le dio la vida y se sentó en silencio a escuchar las historias de su padre.

Cada vez que hablaba sobre ella siempre se dibujaba una sonrisa en su rostro que la hacía desear tener algo similar a lo que tuvieron ellos, sin el desenlace prematuro. Siempre estuvo tan presente en su día a día que llevó a la futura madre de su hija y esposa para presentarla. Así era él. Leal a su corazón.

Estuvieron en el cementerio cerca de una hora hasta que llegó el taxi que pidió Mark. Primero irían a casa para celebrar entre ellos con un pequeño pastel que estaba preparando Lauren para ellos. Ella ya era parte de la familia, así que no le iban a hacer un desaire al presente que le estaba poniendo mucho empeño.

7:15 pm

Cuando llegaron al bar, Freya y Callum ya estaban esperándolos en una de las mesas cercanas a la barra. Mackenzie tuvo que entrar por su cuenta, ya que Mark se quedó en la entrada para contestar una llamada. Se acercó a saludar a sus amigos, y por supuesto que la primera pregunta que harían sería si él iba a llegar. La respuesta correcta era que sí, aunque no tenía idea de cuándo llegaría o si es que realmente iría. No había vuelto a contactarse con él después de su último reencuentro. Estuvo muy cerca de llamarlo, pero siempre se arrepentía apenas presionaba el botón para llamar.

Pensó que Mark regresaría acompañado de Brandon, pero llegó solo a su mesa a saludar a sus amigos. Hubo una pequeña presentación con Callum, y luego pidieron la primera ronda de bebidas y aperitivos mientras disfrutaban de la música. Una parte de ella estaba concentrada oyendo la conversación, mientras el otro estaba pendiente de ver quien cruzaba por la entrada. Ya habían pasado cerca de diez minutos desde que llegaron, así que temió que Brandon no pudiera asistir. Su mellizo no mostraba ningún signo de preocupación al respecto que pudiera significar que Brandon iba a llegar o todo lo contrario.

Cualquiera de las opciones, no tenía que importarle demasiado. Le estaba dando mucha atención a una persona cuando debía estar disfrutando su noche. Estaba celebrando su cumpleaños, y su diversión no podía depender de la presencia de alguien. Eso fue lo que dijo hasta que vio a Brandon avanzando hacia su mesa. Todo a su alrededor parecía que estaba yendo a cámara lenta cuando vio que le sonreía ampliamente como si ambos estuvieran en una perfecta relación. Podía decir que eran amigos, aunque ¿estaba bien serlo mientras estuviera saliendo con Sabina? Había evitado preguntarle y no quería hacerse falsas esperanzas cuando sabía que no iba a quedarse por mucho tiempo en Dublín. Solo era un simple capricho.

Brandon se sentó en el único asiento libre al lado de Mark, disculpándose por la tardanza. No entró en muchos detalles de lo pasó, a excepción que fue un pequeño accidente por la lluvia. Él estaba bien, así que Freya comenzó a guiar la conversación para cambiar el tema. Su primo también se dio cuenta de lo que trataba de hacer, y de un momento a otro, estaban recordando las épocas en la escuela. Había momentos que ya había olvidado, otros que apenas recordaba y varios que seguían intactos en su memoria como la vez que Callum y su grupo casi incendiaron un salón de clases.