No puedo seguir con esto

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3 de junio

Brandon no tenía planeado asistir a la ceremonia de graduación. Hubo un momento en que creyó que perdería el año o en el peor de los casos, terminaría en una correccional como decían todos, así que era toda una hazaña haber terminado a tiempo. Ya ni siquiera le importaba su mal historial en la escuela. Servía cómo una prueba viviente de que los alumnos podían enderezar su camino. Ya podía imaginar al Harford llorando como un padre orgulloso mientras recibía su diploma y tal vez ese fue su primer motivo para asistir.

Su madre y su hermana terminaron acompañándolo a la escuela. Al menos su madre aún no creía que realmente se estaba graduando sin ningún tipo de problema. Las acompañó antes de iniciar la ceremonia mientras esperaban al resto de los alumnos y familiares. Estuvo buscando a la pelirroja entre la multitud, y la encontró, pero no iba acompañada de ninguno de sus padres. Podía entenderlo. Sabía que Freya ya había regresado a la ciudad, así que no le sorprendió verla a su lado. Calum debía estar también ahí, era de sus amigos más cercanos, pero también estaba aquel otro chico.

Por un momento, tuvo el impulso de acercarse a Itzel. No tenía ningún monólogo pensado de antemano, simplemente quería hablar con ella antes de que el tiempo se agotara. Antes de que no pudiera alcanzarla. Sin embargo, Sierra apareció de la nada a su lado para llevarlo hasta la zona donde se tenían que sentar. Todavía quedaban varios minutos para que la ceremonia diera inicio y aún así, no pudo siquiera pasar por su lado. Se quedó observando a la distancia, viendo cómo reía y la pasaba bien en la compañía de ellos. A simple vista parecía que estaba feliz, aunque había algo inusual en su expresión que no encajaba.

Tampoco tuvo mucho tiempo para un rápido análisis, porque todos fueron llamados para ponerse su vestuario para la ocasión e iniciar con la ceremonia de una vez. Nadie cometió ningún error ni ocurrió ningún incidente en todo el desarrollo. Un par de profesores terminaron derramando un par de lágrimas por sus estimados alumnos, pero en general, todo salió bajo control. Luego de la ceremonia, se iba a hacer una pequeña celebración a modo de despedida entre los alumnos y los familiares que desearan quedarse acompañar al recién graduado.

Vio que Freya se quedó conversando con un profesor, mientras que Itzel se dirigía a la salida en compañía de su... prefería no decir ninguna denominación. Parecía que sólo lo estaba acompañando, así que se levantó de su sitio para ir detrás de ella. Sabía que Itzel trataría de ignorarlo, así que se ocultó para sorprenderla. Aunque él terminó siendo sorprendido al ver que ella no iba de regreso al gimnasio, sino al invernadero. Su intención no era asustarla, pero ser silencioso no fue una buena manera de acercarse.

—¿Qué crees que haces? —exclamó la pelirroja al mismo tiempo que lo empujaba hacia atrás. En vez de estar molesta, parecía estar ansiosa y nerviosa de que alguien los viera. Apenas dio un paso atrás, no dejó de mirar a su alrededor—. Te dije que...

—Necesito hablar contigo

—No tenemos nada de qué hablar los dos —indicó ella y se dirigió de nuevo hacia el auditorio. Pero Brandon la detuvo sujetándola de la muñeca.

—Por favor, Itzel —dijo él en voz baja, casi como una súplica. Itzel parecía dispuesta a seguir caminando, aunque se quedó de pie esperando a lo que él tuviera que decir, así que continuó—. Sé que no tiene sentido que te pregunte esto, es solo que necesito oírlo de tus propios labios. —Itzel giró. Su mirada lo hizo titubear, ¿realmente quería oírlo?

—¿Qué quieres saber? ¿Acaso es por George? Si es realmente por él, no debería importarte.

—Claro que me importa ¿Realmente lo quieres?

La pregunta la dejó sin palabras. Bastó con verla para entender que algo ocurría. Una chica no seguiría teniendo esas expresiones luego de iniciar una relación. O tal vez solo estaba buscando las palabras adecuadas para no lastimarlo más.

¿Fue parte del destino?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora