Un rival a la vista

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16 de mayo

¿Quién era el chico que se había ido con Itzel? Era una pregunta innecesaria, porque Brandon lo conocía de cierto modo por las veces que lo vio al lado de la pelirroja. El detalle estaba en por qué sujetaba su mano, ¿qué tipo de relación tenían en ese momento? Según recordaba eran amigos que se habían vuelto a encontrar después de varios años y aún así no podía quitarse de la mente la imagen de ellos marchándose juntos y riendo en complicidad.

Si no hubiera dudado en acercarse en el momento que ese idiota se acercó a Itzel con otras intenciones, no estaría al pendiente de que ese nuevo chico estuviera yendo después de clases. A simple vista parecía ser un tipo agradable, alguien correcto que podía merecer a Itzel, pero aún así no estaba cómodo con la idea de que ella estuviera saliendo con alguien. Porque eso significaba que sus sentimientos por él se enfriaban, aunque también era consciente de que no tenía ningún derecho en meterse. No estaban en ningún tipo de relación y ya ni sabía si podía considerarse como parte de su círculo social.

Ese día, el mismo chico también estaba esperando fuera de la escuela con un paraguas. Realmente, ya no era una novedad verlo, pero Brandon no tenía tiempo para quedarse a observar y sufrir de a poquitos. Tenía que recoger a su hermana antes de que el clima empeorara. Le había prometido comprarle su helado favorito, así que tenían que apresurarse en llegar a la heladería mientras no hubiera demasiadas personas.

Brandon pensó que tendrían suerte de llegar a casa sin ningún problema, pero apenas dieron unos pasos fuera de la heladería cuando una fuerte lluvia los sorprendió. De hecho ya estaba pronosticada la temporada de lluvias y ambos llevaban un paraguas consigo, así que no había motivo para preocuparse en que alguno terminara empapado. Solo tenía asegurarse de que su hermana no se tropezara con algo a mitad de la calle por estar concentrada en acabar su vaso de helado. Iba a ser una caminata tranquila hasta la estación del bus cuando de pronto Sam se detuvo y señaló hacia una de las calles. Su voz era aplacada por el sonido de la lluvia, pero aún así logró distinguir un nombre.

Alzó la mirada en la dirección que señalaba su hermana. Y desde esa distancia, reconoció el cabello rojizo de Itzel. Por unos segundos estaba feliz de aquella casualidad hasta que se percató que estaba acompañada de su amigo. Aunque ya no sabía si referirse a él como un amigo. Ambos compartían un mismo paraguas, lo cual no tenía nada malo; sin embargo, sus ojos se fijaron en cómo él la rodeaba con un brazo, mientras ella se apoyaba en él y conversaban como si estuvieran teniendo un buen momento. Se podía notar que había una conexión especial, aunque él no estaba dispuesto a admitirlo. Por suerte, ninguno se dio cuenta de él y su expresión agria.

Estaba molesto. Molesto consigo mismo, porque había dicho que haría lo imposible para estar a su lado y en ese momento, la veía de lejos siendo feliz con alguien más. Estaba molesto, porque sabía que eso significaba que su historia terminaría oficialmente con el día de la graduación. Y estaba molesto, porque no fue suficiente. Tuvo muchas ganas de gritar al aire en ese preciso momento para sacarse de encima todo ese enojo, pero decidió regresar a su casa con su hermana. No iba a obtener nada haciendo un espectáculo en medio de la calle, necesitaba hablar con alguien. Con una persona que lo escucharía sin juzgarlo y criticarlo y que por tonto se había alejado. Porque a pesar de que seguía siendo empujado a kilómetros de distancia, él no dudaría en correr hacía ella.

***

3 días después,

—¿Sucede algo? —La voz de George le hizo recordar que estaba con él en una cafetería—. Desde que llegamos te ves un poco distraída.

—No es nada, solo estoy pensando en los días que faltan para que termine la escuela —contestó ella mientras jugueteaba con sus dedos sobre la mesa—. Me preguntó qué pasará después. —Solo lo dijo, sin saber exactamente a qué se refería. Si a su futuro a nivel académico, familiar o sentimental o en todo. Sentía mucha angustia de lo que pudiera venir dentro de poco tiempo.

¿Fue parte del destino?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora