Capítulo 3

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Jessica Jackson.
Miercoles 5 de enero. 7.00
°
Bajo las escaleras suspirando pues no quiero ir a esa cárcel, veo a mi madre tirada en el sofá con colillas junto a ella y su polvo blanco sobre la mesa.
~
-Menuda mierda de madre. -digo fría.
-Adios niña. -ataca.
-Vete a tu habitación vieja estúpida. -respondo.
-¡No me hables así! -alza la voz.
-No me grites. -advierto.
~
Mi drogada madre se pone en pie acercándose a mi dispuesta a darme un bofetada, agarro su brazo fría y niego.
~
-Tengo muchos pelos en el coño para que me andes pegando ¿entiendes? -digo seria.
-No tienes educación. -ataca notablemente drogada.
-¡No tengo educación por tu culpa! -le grito.
-¡Las dos! -grita mi padre.
~
La suelto marchandome a la calle y tras agarrar mi mochila me voy dando un fuerte portazo.
Enciendo un cigarrillo de camino a clase pues voy muy pronto y me siento en un banco frente el instituto.
~
-Tia. -dice mi amiga.
-Hola Eli. -digo seria.
~
Se sienta a mi lado, enciende uno y me mira.
~
-¿Qué haces aquí? -pregunto.
-Eso debería decirte yo. -se rie.
-Rayadas. -la miro.
-Le he mandado a chuparla, le dije que no quería saber nada de él. -comenta.
-Me alegro. -tiro la colilla.
~
La miro sonriendo y niego.
~
-Mejor no contar que nos hemos liado. -digo riendo.
-Totalmente. -se rie.
~
Reimos a carcajadas pues nos resulta estúpido lo sucedido pero algo sucede que acabo con sus piernas apoyadas sobre mi regazo.
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-Ven. -murmuro.
~
Acabo con sus piernas enrollandome, me besa de una manera húmeda, moviendo sus caderas sobre mi cuerpo y buscando su lengua.
~
-Fumadora y lesbiana. -dice el mismo hombre del otro día.
~
Eli se baja de mi cuerpo, ambas estamos calientes, ambas nos hemos humedecido.
Ese hombre esta dentro de su coche, Eli se pone nerviosa al verlo pero yo hago caso omiso a su comportamiento pues ese hombre mantiene todos mis sentidos en él.
~
-No soy lesbiana, pero mi amiga me pone, no voy a mentirte. -digo sonriendo.
-Podríamos divertirnos los tres. -muerde su labio.
-No me junto con policias. -me pongo en pie.
-No soy poli. -advierte.
-Pero eres un capullo. -digo sin remedio.
-Cuando quieras ven con tu amiga, ella me conoce muy bien. -dice guiñandole un ojo a Eli.
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Se marcha, miro a Eli sin comprender nada y niega.
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-No sé quién es. -advierte.
-Tranquila, mientras me sigas dando el tabaco. -bromeo.
~
Me lanza el paquete y reimos.

La oscuridad de tus brazos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora